La fuerte ola de invierno que se presenta desde hace varias semanas en el país sigue afectando al Departamento del Tolima. En la vía que conecta a Rovira con Ibagué se reportaron varios deslizamientos, así como en la carretera Rovira – Roncesvalles.

Desde finales del mes de marzo en Ibagué se han presentado derrumbes en por lo menos 25 veredas, en muchas de las cuales dichos derrumbes han ocasionado aislamiento e incomunicación de varios sectores.

Se adelantan monitoreos en 30 poblaciones vulnerables a deslizamientos, en las cuales se han detectado más de 100 puntos críticos que están siendo monitoreados constantemente.

Medidas para mitigar el impacto del invierno en el Tolima

En la sala de prensa de la Gobernación del Tolima se llevó a cabo el Consejo Departamental de Gestión del Riesgo, el cual busca implementar medidas con respecto a la primera temporada de lluvias que, según dio a conocer e IDEAM, tomará fuerzo a partir de la tercera semana de abril e irá hasta el mes de mayo.

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En dicha reunión dio a conocer los resultados del monitoreo a la represa de Prado, la cual se encuentra en un nivel estable y en revisión constante por parte de los organismos de socorro de la región.

Sobre la declaratoria de alerta amarilla en el departamento, se estableció que la medida será revisada de nuevo en horas de la tarde de hoy con el fin de determinar si es necesaria o no.

Preocupación en el sector productivo por temporada de lluvias

Las recientes lluvias que se han registrado en el Departamento del Tolima tienen preocupados a varios representantes del sector productivo, los cuales se han visto afectados por el impacto en el desarrollo de sus actividades comerciales.

Los sectores cafeteros, arroceros y ganaderos son los renglones económicos que más se han visto afectados en la región.

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“Teníamos conocimiento de la fortaleza con la que venía esta temporada de lluvias y hay mucha gente preparada. Sin embargo, no hemos encontrado afectaciones en el tema agrícola, pero sí hemos encontrado afectaciones en infraestructura que perjudican la movilidad de las cosechas”, manifestó Gabriel Márquez, miembro de Fedearroz y vocero del gremio arrocero en el Tolima.