En un Confidencial de la revista Semana, del pasado 27 de mayo, reveló que en un libro que publicó Luis Fernando Acosta, alias Ñangas, otro sicario de Pablo Escobar,  narra que fue testigo de primera mano de una conversación en la cárcel de Valledupar donde se planificó la vinculación de algunas personas en actos terroristas del cartel de Medellín aunque estas no tuvieran ninguna responsabilidad.

El exsenador tolimense Alberto Santofimio, fue escogido entre una de estas víctimas y el encargado de hacer el montaje fue Jhon  Jairo Velásquez, alias Popeye, quien armo la falsa acusación. Sobre las afirmaciones de este delincuente acusando a Santofimio de ser presuntamente, el instigador de este crimen, se han tenido muchas dudas sobre esta 'verdad' que la justicia dio por sentada y sobre la cual se apoyo para condenar al político tolimense.

Tanto es el manto de incertidumbres que muchos juristas y dirigentes políticos del país han sostenido que este proceso que culminó con  la sentencia de Santofimio a 26 años, es más político que jurídico e inclusive, el afectado tiene una apelación que está en curso ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos para que se revise su contaminado proceso.

Las afirmaciones de Popeye son cuestonadas por diversos sectores, porque en el país, en la época de Pablo Escobar, todo mundo sabía que Galán era objetivo principal del cartel de Medellín por su férrea posición a favor de la extradición de los narcotraficantes a los Estados Unidos, y ya se habían registrado dos atentados contra el sacrificado dirigente liberal. Además, quienes conocían al capo señalan que este no le obedecía a nadie, y que la decisión de asesinar a Galán, se  había tomado solo por Pablo Escobar sin la ingerencia de nadie tal y como lo afirmó Popeye . El Confidencia de la revista Semana dice:        

"El mismo día en que Alberto Santofimio salió de la cárcel para pagar el resto de su condena en detención domiciliaria, salió a la luz pública el libro de Luis Fernando Acosta, alias Ñangas, el sicario de Pablo Escobar especializado en explosivos. Este cuenta que estando en la cárcel de Valledupar con Popeye, el guerrillero de las Farc Yesid Arteta y el exsenador del Quindío Carlos Alberto Oviedo, presenció una conversación en la cual se planteó la posibilidad de vincular a algunas personas a actos terroristas del cartel de Medellín aunque estas no tuvieran ninguna responsabilidad. Uno de estos era Alberto Santofimio, quien se había distanciado de Escobar después de haber hecho política con él. Ñangas afirma que él se negó, pero que la iniciativa salió adelante por cuenta de Popeye".

(Puede ver: Versión de Ñangas)