Este domingo el alcalde Andrés Hurtado entregó un balance positivo sobre la seguridad en la ciudad de Ibagué. Lo hizo junto al ministro de Defensa, Diego Molano, quien visitó la capital tolimense para participar en un foto de seguridad ciudadana.

En medio de la jornada, el mandatario local aseguró que Ibagué es más segura que en la administración de su antecesor, Guillermo Alfonso Jaramillo.

"En el gobierno anterior hubo 14.360 casos de hurto a personas, y en nuestro gobierno llevamos 7.758, lo que indica que se redujo en un 46 %. Es decir, hoy tenemos una ciudad más segura que hace cuatro años", indicó Hurtado.

Asimismo, el alcalde reveló que, en lo corrido de su gobierno, se han registrado 171 casos de homicidio en Ibagué. Mientras que, en el cuatrienio de Jaramillo hubo 345. "Ibagué está hoy más segura que en el anterior gobierno", enfatizó.

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Sin embargo, en su análisis el alcalde Hurtado comete algunos errores básicos de interpretación, los cuales naturalmente favorecen el balance de seguridad de su gestión.

En primera instancia, entrega cifras de cuatro años del periodo de Jaramillo, comparadas con apenas dos años que han transcurrido de su gobierno. Cuando refiere reducciones del 46 % en el hurto y del 50 % en homicidios, toma cifras de cuatro años, y las compara con las de sus dos años de mandato.

Es apenas normal que en cuatro años se registren una mayor cantidad de delitos, que en dos años. El ejercicio matemático se debería basar en el 50 % del gobierno de Jaramillo, con el 50 % del gobierno de Hurtado. Así, se evidencia que en dos años de cada gobierno, se registró casi la misma cantidad de asesinatos.

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Otro aspecto a tener en cuenta, son los meses de confinamiento por la pandemia del covid-19, los cuales llegaron en el primer año de gobierno del alcalde Hurtado. Es apenas previsible que la cantidad de delitos se reduzcan significativamente, si la mayoría de la población tuvo que pasar entre tres y cuatro meses encerrada en sus viviendas.

En cualquier caso, si el alcalde Hurtado insiste en comparar los indicadores de su administración con los de Jaramillo, deberá hacerlo a finales del 2023, y no cuando la suya apenas lleva un poco más de 50 %.