El estamento profesoral de la Universidad del Tolima emitió un comunicado en el que se muestra preocupado por la posible reestructuración organizacional que afrontaría el alma mater. El estudio que las directivas le pagaron a la Universidad del Valle propondría ampliar la planta administrativa, lo que generó inmediata polémica y malestar en los demás estamentos de la UT.

“Resulta inconcebible que, en la actual situación académico-administrativa institucional, el estudio recomiende aumentar la planta global de cargos administrativos, previa reclasificación de cargos hacia un nivel jerárquico superior, principalmente, cuando lo que se necesita, en realidad, es la ampliación de la planta global de profesores de la Universidad del Tolima”, reza el comunicado, que fue producto de una Asamblea General de maestros.

En diálogo con El Cronista.co, el profesor Félix Salgado, quien además es miembro de la Asociación Sindical de Docentes de la Universidad del Tolima (ASDUT), aseguró que actualmente hay 468 cargos administrativos en la institución, y que, el estudio propondría incluir unos 300 más. “Nos preocupa que es un estudio unilateral, que no consulta al estamento profesoral ni estudiantil. No es una mirada conjunta, compartida, sino administrativista, que no tiene en cuenta las necesidades académicas. Somos nosotros los que conocemos sus fortalezas y debilidades. La Universidad del Valle no nos tuvo en cuenta”, agregó.

En ese sentido, Salgado no comprende muy bien porqué se contrató el estudio con la Univalle, pues se podría haber sacado adelante con los propios estamentos de la UT. “Yo nunca he visto una universidad haciéndole estudios a otra, a menos que hayan otros intereses. Las mismas dinámicas de las instituciones les permiten reestructurarse por sí solas. Lo que debemos ver es qué tipo de universidad queremos. Esta administración todavía tiene el mismo plan de desarrollo que la anterior, de hace cuatro años, pero sí quiere meter 300 empleados más”, sostuvo él.

Añade que el estudio que habría costado unos $1.000 millones, a futuro posiblemente tendría implicaciones políticas. Cabe recordar que son recurrentes las críticas que tildan de clientelista y excesivamente burocrática a la administración de la UT. De un lado los cargos en su mayoría serían repartidos como cuotas políticas del “barretismo” y del otro la sobrepoblación de administrativos tendría a la universidad entre las que más tienen en todo el país.

• Puede leer: La UT ahora cuenta con programa de Química

“La universidad tiene aplazados gastos por $39.000 millones. Entonces si no hay ese dinero, de dónde vamos a sacar el presupuesto para pagar esos 300 funcionarios, o es que son los compromisos con la clase política de este departamento, con la Gobernación, con todo el grupo político que domina la universidad y muchas entidades gubernamentales, donde necesitan puestos para cumplir con los compromisos politiqueros”, aseveró Félix Salgado.

En contraste al alto número de funcionarios, resulta llamativo la desproporción de docentes de planta. Actualmente solo hay 321 profesores de estos vinculados a la UT, de 800 que debería tener.

En el comunicado el estamento profesoral de la UT propuso “la conformación de una Comisión Técnica compuesta por profesores expertos en el tema”, que analice y autorice la implementación del estudio de la Univalle. Además, exigen “la revisión y aceptación previa, de la versión del Estatuto Profesoral que surja del ajuste hecho por el Consejo Académico, antes de su aprobación en el Consejo Superior”.

Por la coyuntura de la pandemia, los profesores de planta y catedráticos también exigen dotación de “equipos, paquetes informáticos y las conexiones necesarias en sus casas para orientar adecuadamente sus clases”.

Otro punto en el que insisten, es en el nombramiento inmediato de Decanos en propiedad. El plazo máximo en el que podrían estar de interinos serían 90 días, y a hoy varios lo habrían rebasado. “Los Decanos deben ser elegidos por los profesores, estudiantes y egresados; no necesitamos que el rector nos venga a poner a dedo un Consejo Académico para que lo pueda manejar como quiera”, esgrime el docente Salgado.