La universidad pública de la región no ha sido ajena a todas las implicaciones que ha significado la pandemia del Covid-19, por lo que ha visto afectadas, principalmente, sus actividades académicas. Ante la situación, el Consejo Académico del alma mater decidió que las clases se iniciaran virtualmente.

“Nos vemos enfrentados a una crisis sanitaria mundial de la cual no escapa nuestra ciudad. Por esta razón el Consejo Académico decidió que las clases se iniciarán el próximo 30 de marzo, como está previsto en nuestro calendario académico… la invitación es a que los profesores adecuen sus micro currículos para dar inicio a las clases haciendo uso de las herramientas digitales. Esta es una medida temporal, esperamos regresar pronto a las aulas”, precisó María Bianney Bermúdez, Vicerrectora Académica de la UT.

En este sentido, el área administrativa de la UT hace un llamado a que los estudiantes usen la ‘Caja de Herramientas e Instrumentos Digitales’, preparada por ingenieros de la institución. 

 Mientras la administración cree que estas mediaciones tecnológicas serán suficiente para sacar adelante las actividades académicas, los estudiantes están lejos de pensar lo mismo. 

El estudiantado arguye que la mayoría de los programas requieren de las clases presenciales, pues las actividades teórico-prácticas así lo demandan. Entre dichos programas figuran principalmente Arquitectura, Educación Física, Topografía, Medicina Veterinaria, Artes Plásticas. Precisamente este último, extendió una carta al Consejo Académico donde le pide que reconsidere el inicio de clases de forma virtual.

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“El programa de Artes Plásticas y Visuales incluye dentro de su plan curricular asignaturas prácticas y teórico-prácticas que no pueden realizarse a través de medios digitales ya que requieren de una serie de condiciones físicas para el desarrollo de las mismas, como lo son los talleres de fotografía, cerámica, dibujo, pintura, serigrafía, lenguajes gráficos, cuerpo”, sostienen en la carta.

Adicional a eso, invitan a reflexionar acerca de las condiciones socioeconómicas de los estudiantes que no contarían con la posibilidad de sostener una clase en línea. Ante las circunstancias que les impiden convocar a una asamblea estudiantil, han creado encuestas y están reuniendo firmas, virtualmente, para que las directivas de la UT tengan en cuenta su voz de rechazo al inicio de las clases en las condiciones ya dichas.

Otro de los puntos sensibles que reclama el estudiantado, es el pago de las matrículas. Aluden que las dinámicas económicas en estos momentos no son las óptimas, para reunir los recursos que les permitan pagar sus semestres. Por lo tanto piden que también se amplíen las fechas de pago de matrículas del semestre A 2020.

 El Consejo Académico en su comunicado señaló que los programas que ya tienen establecidos sus cronogramas de trabajo, deberán iniciar clases virtuales el 30 de marzo. Los que aún no, es competencia de los comités curriculares decidir si adaptan sus contenidos a estas circunstancias, o si por el contrario, suspenden temporalmente sus actividades académicas. 

Instancia que piden los estudiantes sea adoptada decididamente por toda la institución, hasta que pase esta coyuntura por la pandemia del Covid-19.