El alcalde de Ibagué, Andrés Hurtado, reveló que en su gobierno, que va hasta el 31 de diciembre del 2023, no alcanzará a entregar todos los colegios públicos que están en obras de Jornada Única.

 Los proyectos que empezaron en la administración de Guillermo Alfonso Jaramillo, en su mayoría han sufrido retrasos por incumplimientos de los contratistas.

En total son 28 instituciones educativas que están en obras para la implementación de la Jornada Única. De esas, 26 son de la administración municipal en alianza con el Gobierno Nacional y el Fondo de Financiamiento de la Infraestructura Educativa (FFIE). 

"Se han reasignado los contratistas de tres proyectos. Estamos muy pendientes, porque así sean proyectos del Gobierno Nacional, también hay recursos de los ibaguereños por $75.000 millones. Además hicimos un crédito para apalancar y entregar las obras. Contratamos tres ingenieros expertos para que estén encima únicamente de los proyectos de los colegios", indicó Hurtado.

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De acuerdo con el alcalde, en el transcurso de este año 2021 se entregarán por lo menos siete de los colegios. El primero fue el colegio Alfonso Palacio Rudas. Las otras instituciones educativas serán el Francisco de Paula Santander, el Carlos Lleras Restrepo, el Alberto Santofimio Caicedo, el Antonio Reyes Umaña, el Fernando Villalobos Arango y el Ambiental Combeima. 

Los otros colegios que, según el alcalde avanzan a buen ritmo, son el Celmira Huertas y el Niño Jesús de Praga. Sin embargo, el mandatario aclaró que en su periodo de gobierno no alcanzará a entregar todos los colegios de Jornada Única.

"Nos hemos propuesto una meta, y es que en nuestro gobierno entreguemos 15 instituciones completamente construidas. Hay otras que van con procesos de construcción mucho más largos, como el colegio San Simón, el INEM, el Santa Teresa de Jesús, que son muy queridos en la ciudad, pero que son inversiones muy grandes que requieren periodos de construcción de tres a tres años y medio. Lo cierto es que las vamos a dejar en marcha", aseguró. 

Hurtado también sostuvo que el colegio José Joaquín París es el que más problemas presenta en sus obras y adecuaciones. "Lo dejaron a la intemperie durante muchos años, por lo cual se le debe hacer un estudio de patología a los cimientos, para determinar si se puede aprovechar su infraestructura o si se debe demoler, como sucedió con los escenarios deportivos. Estamos esperando que reasignen el proyecto", puntualizó. 

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De otro lado, el alcalde sostuvo que nueve colegios están en proceso de renovar su licencia urbana ante la Curaduría. Entre ellos, el colegio José Antonio Ricaurte y el Darío Echandía, que deberán contruir otro piso porque aumentaron su población estudiantil.