El último informe del Departamento Nacional de Estadísticas (DANE) revela que más de la mitad de los trabajadores en Colombia, aproximadamente 12,83 millones de personas, se encuentran en situación de informalidad laboral. Aunque la cifra representó una reducción del 2,5% en comparación con el mismo periodo de 2022, la proporción de ocupados informales sigue superando el 50%.

En el desglose de las cifras, Ibagué se ubica entre las capitales con menor incidencia de informalidad. Sin embargo, a nivel nacional, algunas ciudades muestran tasas preocupantes. Sincelejo encabeza la lista con un 68,4%, seguida por Valledupar (64,3%), Cúcuta (62,8%), Santa Marta (62%) y Riohacha (61,7%). En contraste, ciudades como Bogotá (32,2%), Manizales (32,4%), Medellín (39,2%), Tunja (40,8%) y Pereira (43,3%) presentan menores índices de informalidad laboral.

Expertos en seguridad social dicen que “Actualmente cotizar supone que primero se tiene que hacer sobre un ingreso base, que se actualiza conforme varía el salario mínimo legal mensual vigente, y esto puede resultar muy alto. Segundo, los esquemas de seguridad social están fraccionados, son inflexibles y no se adecúan a las dinámicas propias del mundo del trabajo".

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En otro de sus apartes publicados en el diario La República dicen que los trámites administrativos también contribuyen a la persistencia de la informalidad, ya que existen múltiples formularios y procesos no unificados. 

En este contexto, la necesidad de una reforma laboral que aborde estos desafíos se vuelve evidente. La experta concluyó: "Ese es uno de los temas que claramente debería ser una prioridad en cualquier reforma laboral que se esté pensando, en cómo mejorar indicadores de informalidad, que en el caso de Colombia son bastante altos".