El pasado 22 de febrero la Sociedad de Activos Especiales (SAE) informó que el Estado por fin había recuperado la Hacienda TaoTau, que le perteneció en su momento al narcotraficante Gonzalo Rodríguez Gacha, alias ‘El Mexicano’.

Al predio con más de 1.200 hectáreas, ubicado en el municipio de Ambalema, Tolima, un juez de la República le había aplicado extinción de dominio a favor del Estado. Sin embargo, dicha sentenció nunca llegó a la Oficina de Instrumentos Públicos, lo que dificultó que el Estado lo tomara en propiedad y lo distribuyera entre los campesinos.

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“El predio, recibido en 2014, ha enfrentado ocupaciones irregulares y litigios. Desde 2021, el ocupante impedía el ingreso; tras un proceso de desalojo, la SAE logró entregarlo a Agrotesoro, organización campesina que estará a cargo de la producción de su tierra con fines agrícolas”, informó la SAE en un comunicado a la opinión pública.  

La SAE informó, además, que el ocupante del predio, el mismo que impedía el ingreso, y trataba de apropiarse ilegalmente de la hacienda, era Francisco Javier Ocampo. A todos los medios de comunicación del país y el departamento se les pasó por alto quién era el ocupante. Pues bien, El Cronista.co pudo establecer que se trata de un integrante de una prestigiosa familia tolimense.

Ocampo Torres es un reconocido arrocero del Tolima y también teniente coronel retirado del Ejército Nacional. Asimismo, está casado con Luz Marina Tobar, hija del recordado empresario tolimense del sector avícola, Salomón Tobar. Es decir, pertenecen a la élite empresarial del departamento.

Sin embargo, este no es el primer escándalo por presuntos negocios ilegales con predios, en el que se ve involucrado el empresario y exmilitar. El nombre de Ocampo Torres, en febrero de 2023, salió a la luz pública por la polémica venta de una vivienda en Reservas del Campestre para el entonces alcalde de Ibagué, Andrés Fabián Hurtado.

El negocio, que legalizaron oficialmente por cerca de $1.400 millones, presuntamente habría tenido costos más elevados ‘bajo cuerda’, supuestamente para evadir impuestos. Así lo denunciaron en su momento medios de comunicación, como el portal El Olfato, que aseguró que “la casa realmente costó entre $2.800 y 3.000 millones”. El resto del dinero se habría entregado en efectivo. No sobra advertir, que sobre este hecho el exalcalde de Ibagué aún no ha entregado a la opinión pública una explicación sobre los orígenes de los dineros con los cuales adquirió ese bien inmueble.

Dos años más tarde, el nombre del empresario Ocampo Torres aparece de nuevo a la palestra pública por la invasión que realizaba en la multimillonaria hacienda del excapo Rodríguez Gacha.

De acuerdo con información suministrada por la SAE, la hacienda es apta para ganadería y tiene un alto potencial agrícola para productos como el arroz, el café y el aguacate. El predio lo habían ocupado de manera irregular, hasta que el pasado 18 de febrero se llevó a cabo la diligencia de desalojo, en la que estuvo presente Francisco Javier Ocampo, quien “atendió la diligencia y fue retirado junto con sus pertenencias”.

Después de 40 años, en los que la Hacienda TaoTau fue escenario del narcotráfico, el paramilitarismo y el despojo, por fin fue entregada a campesinos que podrán trabajar en su propia tierra.