En el mes de diciembre recibí la invitación, de un autor de libros de matemáticas para los colegios Champagnat, a leer el texto “La generación ansiosa” de Jonathan Haidt, un estudio profundo sobre el porqué las redes sociales están causando una epidemia de enfermedades mentales en nuestros jóvenes. Aunque no conozco estudios en Colombia sobre el consumo de internet y redes sociales en niños, adolescentes y jóvenes, creo que no dista mucho de la realidad mostrada en Estados Unidos de América o Inglaterra.

Puede ver el video del columnista hablandono del tema en este link

Por eso, celebro la determinación de estas instituciones educativas de muchas partes de Colombia, no solo privados, también los públicos, que decidieron de forma tajante el no uso de celulares en los colegios, y pese a la resistencia de algunos padres de familia en un inicio, condujo a tener jóvenes más conectados en el cara a cara.

Por eso, ahora que inician clases en todos los colegios del Tolima la pregunta obligada es ¿cuántos colegios de nuestra región ya tomaron esa determinación? ¿Cómo fue ese proceso de socialización con los padres de familia? ¿Realizarán un test que permita ver cómo evoluciona de manera positiva, por ejemplo en gestión de las emociones nuestros estudiantes?.  Espero que sean muchos los colegios, por el bien de nuestros hijos.

Uno de los mejores deportistas del mundo, el tenista Novak Djokovic dijo en su momento a la cadena Blic: “Mis hijos todavía no tienen teléfono móvil y mi mujer y yo estamos peleando con ellos. Ellos se quejan y dicen: 'En el colegio todo el mundo tiene excepto nosotros'. No es una situación fácil, porque es el reflejo de lo que ocurre también en otros niveles”.

Más adelante complementa diciendo "Si todos hacen algo, el rebaño se comporta igual, tienes que seguirlos. Bueno, no siempre tiene que ser así. Ahí es dónde yo creo que nosotros nos diferenciamos de otros, porque somos testarudos y activos”.

Para muchos padres el comenzar la edad adulta es a los 16 años como lo propone Haidt, en muchas casas están siguiendo esta recomendación. Algunos hijos pueden llegar a teléfonos básicos o relojes inteligentes con el número de sus padres y nada más. Y es a partir de esa edad que podrían tener la responsabilidad del manejo y uso de redes sociales sin supervisión.

No dejemos que sean los teléfonos inteligentes los que inhiban las experiencias que tienen que vivir nuestros hijos en el mundo real. Los estudiantes necesitan de espacios vivos donde puedan volver a vivir desde los ritos del ser niño a adulto. Los padres tienen esa tarea o asignación pendiente, porque el celular jamás reemplazará al hombre.

La noticia positiva en su momento la generó la gobernadora del Tolima, Adriana Magaly matiz, en diálogo con ElCronista en el mes de mayo de 2024, indicó que desde la secretaría de Educación se concreta con 80 colegios públicos adelantar esta política de no celulares al interior de las instituciones educativas. Ojalá sean muchas más. Ojalá tenga la oportunidad de ver a muchos niños y adolescentes empleando su tiempo  en actividades al aire libre y empecemos a ver como disminuye por ejemplo la asistencia en los centros hospitalarios de los niños por ansiedad o depresión. De eso hablaremos en otra columna.