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Condenan a defensora de familia por torturas a niños discapacitados en Ibagué
La Fundación Peces Vivos se ubicaba en el barrio La Pola de Ibagué.
A dos años y ocho meses de cárcel fue condenada la exdefensora de familia Kelly Tatiana Vergara Ramírez, por omitir los crueles tratos que sufrían niños discapacitados en la Fundación Peces Vivos de Ibagué.
Este sonado escándalo estalló en el 2017. Ese año se conoció que más de 40 niños con discapacidad cognitiva sufrían maltratos físicos y hasta torturas en esta institución ubicada en el barrio La Pola.
Por su parte, la defensora de familia del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) omitió el cumplimiento de sus funciones que consistían principalmente en proteger a los menores.
La Fiscalía demostró que la servidora pública omitió un acto propio de su cargo que consistía en “adelantar de oficio las actuaciones necesarias para prevenir, proteger, garantizar y restablecer los derechos de los niños, niñas, los y las adolescentes, cuando tuvieran información sobre vulneración o amenaza”.
De acuerdo con el ente de control, Vergara Ramírez en varias oportunidades fue informada de lo que ocurría dentro de la fundación. Abogados y familiares de las víctimas le solicitaron que impidiera dichas prácticas. Sin embargo, la mujer nunca lo hizo, aunque era su función legal y constitucional.
"Labores investigativas adelantadas por servidores del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Seccional Tolima, evidenciaron que varias personas que trabajaban en la fundación sometían a por lo menos 40 menores de edad con discapacidad y condiciones especiales, a toda clase de maltratos crueles e inhumanos", precisó la Fiscalía.
La exdefensora fue condenada por ser responsable del delito de prevaricato por omisión. La pena de casi tres años deberá cumplirla en un centro carcelario.
El juez de la República también la condenó a pagar una multa de 13,33 salarios mínimos legales mensuales vigentes.
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