Por: Fernando Varón Palomino

Mauricio Jaramillo, se ha autoproclamado candidato del partido Liberal pero antes de decir lo que todos sabíamos, le dio por hacer una rueda de prensa anunciando supuesta corrupción, advirtiendo eso sí, que él estaba inmerso en investigaciones, precisamente por los fallidos Juegos Nacionales, donde el exsecretario de la colectividad roja, Orlando Arciniegas Lagos, representó dignamente la corrupción o como diría el exsenador, hizo metástasis. En su presentación, bastante malita, el galeno que lo acompañaba fue el mismo que quedó mudo cuando se intervino el hospital Federico Lleras Acosta por estar a punto de su quiebra o el abandono de la clínica del antiguo ISS del Limonar. 

En su lanzamiento como candidato en un potrero, hace un llamado a superar la pobreza y el hambre, que ¡novedad! Pide que hay que; “recuperar la dignidad en el ejercicio político”, aquí lo entiendo, porque evidentemente él ha perdido esa dignidad, o se le olvida cuando se le volteó al candidato liberal para la alcaldía de Ibagué y todo lo hizo soterradamente. Eso es no tener dignidad.

Mauricio Jaramillo Martínez, tiene una obsesión en Oscar Barreto al que acusa de todos los males del Partido Liberal, pero olvida que su colectividad hace rato perdió el norte y no me refiero a esa región del Tolima, sino a la inanición de ideas, de propuestas, de iniciativas y de obras.

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Le damos la bienvenida a Jaramillo y su candidatura, no faltaba más, pero en la hora de ahora, como reiteraba el ex senador Guillermo Angulo Gómez, solo se le pide que haga una campaña limpia, que si tiene que denunciar lo haga ante las autoridades, pero no busque la calumnia como fórmula, por el contrario se le invita a que haga propuestas serias y no lo tradicional, “superar la pobreza y el hambre”, sí claro, todos lo pregonamos, pero usted lleva más de cuarenta años en la vida pública y política y hasta ahora no se le conoce absolutamente nada para esos logros.  Los jóvenes reclaman hechos, por ejemplo, la gratuidad en la universidad que hoy por hoy es ejemplo en el país y ha sido liderada por el Tolima con el gobernador Ricardo Orozco.

Señor Mauricio Jaramillo, si quiere recuperar el liderazgo, no busque el ahogado río arriba, ponga el espejo retrovisor, pero para verse a sí mismo y verá que el pasado no lo favorece y que el presente no dice nada y el futuro es más incierto. No transmita odio.

John P Kotter (Harvard Business Review) “El liderazgo no es algo místico y misterioso. No tiene nada que ver con tener ‘carisma’ o cualquier otro rasgo exótico de la personalidad”. Lo cual para usted es un alivio, ya que si bien es cierto no tiene carisma sí puede lograr algo del prestigio que sus padres le heredaron.

Por ultimo la invitación es sí a su candidatura, pero no así, cambie para que entre al “cambio”.

Fernando Varón Palomino
Abogado y ex concejal de Ibagué