Por Felipe Ferro
*Presidente Asamblea Departamental del Tolima

Esta semana, nuestro departamento ha dado un paso decisivo hacia la transformación. Desde la Asamblea Departamental aprobamos el plan de desarrollo “Con Seguridad en el Territorio 2024 -2027”, el cual no solo marca un hito administrativo, sino que representa una promesa tangible de progreso para cada tolimense.

Este plan, cuidadosamente elaborado con la participación de nuestras comunidades, se convierte en la hoja de ruta que guiará el crecimiento del Tolima durante los próximos cuatro años, apostando por la innovación social, la sostenibilidad y la seguridad.

El Plan de Desarrollo del Tolima es único porque ha sido construido desde el corazón de nuestras comunidades. No es un documento burocrático creado en un despacho lejano; es el reflejo de las aspiraciones de nuestros ciudadanos.

A través de consultas y diálogos en las mesas de innovación que se llevaron a cabo en todas las regiones, se definió tres pilares fundamentales: Innovación para la Transformación Social, Innovación Productiva para la Competitividad y el Desarrollo Sostenible, y el Ambiente e Innovación para la Seguridad y la Paz.

Estos pilares no solo guiarán las acciones, sino que garantizarán un desarrollo inclusivo y equitativo para todos.

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Pero, para poder materializar este ambicioso plan, en la Asamblea Departamental hemos otorgado a la Gobernadora la facultad de negociar un empréstito de 260 mil millones de pesos. Esta inversión no es una simple deuda; es una apuesta por el futuro del Tolima, es una medida necesaria para poder apalancar el desarrollo social del Tolima.

Más aún, cuando desde el gobierno Nacional se ha dejado solo al Tolima y las inversiones son pocas por no decir nulas.

Por eso, cuando aprobamos el empréstito, no pude evitar pensar en cada uno de los niños, jóvenes, mujeres, ancianos, campesinos y personas en situación de discapacidad, que, en cada mesa de innovación, nos insistían por inversiones para sus sectores, que apelaban para que las obras llegaran para mejorar sus condiciones de vida. Por eso este empréstito es más que una decisión financiera; es una respuesta a todas esas voces que claman por acciones concretas en sus territorios.

De los 260 mil millones del empréstito, 81 mil millones se destinarán para saldar una deuda histórica, la construcción y mejora de infraestructuras educativa en municipios como Suárez, Ataco, Coyaima, Gaitana, San Luis, Alvarado, Dolores, Icononzo y El Espinal.

La educación de calidad es el cimiento de una sociedad próspera y equitativa.

Además, 37 mil millones se invertirán en proyectos de gasificación en Anzoátegui, Falan, Coello, Ataco, Rovira, Lérida, Villahermosa, San Antonio, Guamo y Villarrica, mejorando la calidad de vida y reduciendo riesgos de salud. En infraestructura vial, se destinarán 105 mil millones para la pavimentación y mejora de vías cruciales, facilitando el transporte y fomentando el comercio.

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También, se fortalecerá el sector agropecuario con 19 mil millones de pesos destinados a iniciativas clave que potenciarán el desarrollo rural. Uno de los proyectos más destacados es la creación de la primera Escuela del Café de Colombia, que no solo será un centro de formación y capacitación para los caficultores, sino también un punto de innovación y tecnología que permitirá mejorar las prácticas agrícolas y aumentar la calidad de nuestro café. Además, se invertirá significativamente en la renovación y nueva siembra de cultivos de café, lo que contribuirá a la sostenibilidad y competitividad del sector.

La salud y el deporte no quedan atrás, con inversiones en infraestructura hospitalaria y deportiva que promoverán el bienestar físico y mental de nuestros ciudadanos. La ejecución de este plan será vigilada con rigor desde la Asamblea, asegurando que cada peso se invierta de manera eficiente y transparente.

El plan de desarrollo del Tolima es la llave para un futuro de progreso y bienestar. Es el momento de unirnos como tolimenses, de trabajar juntos y de mirar con optimismo hacia un horizonte lleno de oportunidades. Con este plan, el Tolima marcha firme hacia un futuro innovador y lleno de esperanza para nuestra gente.