En redes sociales se viralizó la denuncia de un joven tatuador de la ciudad de Ibagué que invitó a no ir a la discoteca Atenea Night Club, pues según él, había sido discriminado por el staff de la misma debido a sus tatuajes y expansiones, motivo por el aparentemente no se le permitió la entrada al establecimiento.

La publicación tuvo una acogida masiva a través de Facebook y fue compartida más de 600 veces y obtuvo más mil reacciones y 500 comentarios, los cuales, en su mayoría, fueron en respaldo del joven, identificado como Alfred en redes sociales.

Al parecer los hechos habrían ocurrido el sábado 14 de octubre, cuando el joven llegó a la discoteca con un grupo de amigos como cualquier otra noche, sin embargo; cuenta el denunciante, mientras esperaban en la fila, uno de los miembros del staff se le acercó para indicarle que él no tenía permitido el ingreso pues supuestamente, hace poco, alguien con tatuajes y expansiones había cometido un robo dentro de la discoteca y por ello no lo iban a dejar entrar, ya que él también tenía tatuajes y expansiones.

 

 

 

 

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Recientemente, el joven publicó un nuevo video en el que explicó más a fondo lo que aparentemente sucedió esa noche y la reacción de los administradores de la discoteca después de conocida la denuncia en redes sociales.

“Al día siguiente me escribe uno de los promotores de la discoteca y me pide, muy amablemente, que elimine la publicación que porque fue un error del Staff y que ellos generaban mucho empleo y los estaba afectando. Lo único que le pedí para borrar la publicación fue que hicieran un comunicado público pidiendo disculpas por el acontecimiento, pero me respondió que él no tenía por qué hacer eso, así que yo le dije que yo tampoco tenía por qué borrar eso”, acotó el denunciante.

Luego de ello, afirma, a los promotores de la discoteca "se les acabó la amabilidad" y empezaron a atacarlo en los comentarios de la publicación de Facebook, para posteriormente acusarlo de supuestamente haber llegado al lugar en una condición no apta para entrar al establecimiento. 

“La gente que me conoce sabe que yo no tomo, no fumo absolutamente nada, yo estaba en buen estado y bien vestido. Se excusan en el derecho de admisión, a mí no me molesta que no me hayan dejado entrar, sino la razón por la que lo hicieron”, añade.

Finalmente, asegura que su denuncia no tiene como fin atacar a la discoteca (a pesar de que en la publicación inicial invitó a no ir al establecimiento), sino buscar que la administración mejore el servicio a sus clientes.