Durante la campaña electoral del año 2023 a la entonces candidata a la Alcaldía de Ibagué, Johana Aranda, le hicieron una pregunta que, para ese momento, le resultaba incómoda: ¿Qué no le gustaba del gobierno del entonces alcalde Andrés Hurtado? 

El interrogante resultaba incómodo por tratarse de su entonces jefe político y quien puso las maquinarias de la Alcaldía a la disposición de su campaña. La candidata, por contestar algo y no lucir tan complaciente con su mentor, respondió que no le gustaban los constantes cambios o la inestabilidad en su gabinete.

Sin embargo, transcurrido año y medio del gobierno de Aranda, lo que ella consideraba lo peor de su antecesor, también se convirtió en su defecto. La improvisación en los nombramientos de los secretarios y gerentes de institutos descentralizados, al igual que en el gobierno de Hurtado, también han sido la regla en el de Aranda. 

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Inestabilidad que se resume en cinco remezones y más de 20 cambios en su gabinete, en cuestión de poco más de año y medio. El más reciente fue la salida de Leandro Vera, secretario de Desarrollo Social Comunitario, quien presentó su renuncia irrevocable anunciándolo primero ante medios de comunicación y lanzando críticas contra Aranda, quien todavía era su jefa. 

Vera reveló que la alcaldesa ni siquiera le contestaba el teléfono y que se sentía ninguneado, lo que dejó al descubierto la crisis de gobernalidad que atraviesa la administración de Aranda. Esto desató cuestionamientos, como los del concejal de oposición, Andrés Zambrano.

"Una administración que cambia de cargos directivos cada mes, no gobierno, sino que sobrevive, y eso lo que desafortunadamente hoy estamos viendo en Ibagué. Una Alcaldía que en 20 meses lleva más de 20 cambios en cargos directivos, cinco remezones, y esto no es más que el reflejo de la improvisación, la falta de planeación y de no saber cuál es el rumbo", manifestó Zambrano. 

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Según el concejal, la gran cantidad de cambios en el gabinete de Aranda también evidencian los compromisos burocráticos y clientelistas que debe cumplir con diferentes sectores políticos, lo que termina de prevalecer por encima de la correcta gestión. 

"Ibagué no puede seguir gobernada por caprichos políticos. Ibagué necesita una ciudad planificada, organizada, donde no esté la improvisación, sino que se den resultados de cara a la ciudadanía", arguyó el concejal. 

A la fecha, la única cartera de la Alcaldía que se ha mantenido intacta desde el comienzo del gobierno de Aranda ha sido la de Salud. Las demás han sufrido por lo menos un cambio y algunas hasta tres.