El acceso a medicamentos de alto costo se convierte en una odisea para muchos pacientes, especialmente cuando deben lidiar con las condiciones impuestas por droguerías como Audifarma, que ostentan el control exclusivo de ciertas moléculas no solo en Ibagué, sino en toda Colombia.

El equipo de El Cronista.co se adentró como observador en las instalaciones de Audifarma, ubicadas en la carrera 5 con calle 26, y las experiencias recogidas de forma casual entre los pacientes y sus acompañantes no reflejaron en ningún momento satisfacción alguna.

Aide, por ejemplo, fue enviada a recoger un listado de medicamentos en la USI del Jordán y luego a Audifarma por el resto de las pastillas indicadas en la fórmula médica. Esta era ya la segunda vez que debía asistir a ambos lugares, sumando un total de 6 trayectos en buseta por unos medicamentos que deberían ser entregados de manera más eficiente cuando la persona se encuentra enferma.

Alberto, de 57 años, tuvo que enfrentarse primero a la burocracia de su EPS para autorizar los medicamentos, para luego dirigirse a Audifarma y hacer cola para obtener su turno. La actitud de la recepcionista, muchas veces condicionada por su estado de ánimo, refleja una falta de empatía y sensibilidad hacia los pacientes.

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En el caso de que un acudiente debe recoger los medicamentos, se exige que lleve autorizaciones conforme a los formatos de cada EPS. Si estos están escritos a mano, se solicita que sean impresos en un computador, lo que representa otro costo adicional para las personas, como expresó Carlos Roberto Ruiz a ElCronista.co.

Resulta alarmante observar cómo los representantes de Audifarma, cuando no disponen del medicamento, simplemente piden al paciente que firme una hoja y se comprometen a hacer llegar los medicamentos a su hogar. Miryam lleva esperando 15 días para recibir el medicamento en su casa, y ante la falta de respuestas claras, decide acudir personalmente a las instalaciones en busca de una solución, solo para enfrentarse a más dilaciones.

Ante esta situación, surge la interrogante sobre el rol de las Secretarías de Salud frente a estas irregularidades, donde Audifarma impone sus condiciones a expensas de la comodidad y bienestar de los usuarios, porque las EPS inclusive pagan por adelantado algunos medicamentos, pero los que tienen la última palabra son Audifarma.