La alcaldía de Guillermo Alfonso Jaramillo, recuperó los dineros que le habían sido retirados luego de la descertificación impuesta por la Superintendencia de Servicios Públicos por concepto de saneamiento básico y agua potable.

La sanción había sido notificada en razón a que la alcaldía no entregó en el año 2014, durante la cuestionada alcaldía de Luis H. Rodríguez, la información de la inversión de los recursos que le entrega el Ministerio de Vivienda. Estos requerimientos se le hicieron llegar a la siguiente administración, la cual no atendió el caso como era debido.

Posteriormente el alcalde emprendió un viaje en compañía del secretario de desarrollo rural, del gerente del Ibal, de la abogada apoderada del proceso y del concejal Pedro Mora a Bogotá apenas se supo de la sanción. Parece que el viaje surtió efecto pues, se supo en las últimas horas, el Juzgado Octavo Civil le dio la razón al municipio al solicitar que se tuvieran en cuenta los recursos para subsanar esta situación.

Los cerca de 12 mil millones anuales que recibe el municipio para saneamiento básico y agua potable por parte del Gobierno Nacional habían sido retirados a la alcaldía, que los manejaba a través del Ibal, y puestos a disposición de la Gobernación, mediante la Empresa de Acueducto, Alcantarillado y Aseo del Tolima, (Edat). Esta situación tenía muy molesto al alcalde, pues se sabe que el gobernador es su contendor político y quería manejar estos recursos para sus proyectos partidistas en Ibagué.

La semana anterior el secretario de Infraestructura, Andrés Hurtado, había anunciado públicamente que los recursos serían manejados por la Gobernación del Tolima y que ya tenía planes de inversión. Ahora parece que el panorama cambió y los dineros vuelven al municipio y el citado funcionarios se quedó con los proyectos en su escritorio.