Ante la imposibilidad que la candidata a la gobernación del Tolima, Rosmery Martínez,  concediera una entrevista a este portal, como al parecer fue su costumbre con otros medios, y pese a las reiteradas insistencias que le formulamos, decidimos entrevistar a una persona cercana a la dirigente de Cambio Radical.

 En estas circunstancias, para conocer el trabajo, las propuestas y los resultados de esa campaña, acudimos a la gerente de la misma Olga Beatriz González, quien responde a diferentes temas del desarrollo  de la labor que la candidata  Martínez Rosales.

¿Cómo concluye la campaña de Rosmery Martínez?

O. B.  Con una experiencia extraordinaria de haber compartido con toda la población tolimense en los escasos dos meses que tuvimos de campaña.

Pese a las dificultades financieras que tuvimos, logramos calar con nuestras propuestas para construir una nueva política, donde el voto no sea una mercancía sino programas, ideas.

Tenemos una buena mujer como candidata, una mujer honesta que es garantía para todos los sectores de la población.

¿Principales experiencias de la campaña?

O.B. Fueron positivas en todo sentido, pese a nuestra estreches  económica.

Como aspecto fundamental,  consideramos que una de las experiencias es la de construir una nueva cultura política, donde no se compren los votos. El  cambio cultural en la forma de hacer política es urgente para el desarrollo de la democracia en nuestro departamento.

 Espero que este 27 de octubre, el que trabajo que hicimos, se vea recompensando con un triunfo rotundo sobre la corrupción y las malas prácticas políticas.

¿El haberse alejado de los debates no cree que dejó la sensación de debilidad frente a los demás candidatos?

O.B. Ella no participó porque  consideró que no se debía sentar con candidatos que han sido condenados, el uno a 36 meses por pegarle a una mujer y el otro por tentativa de homicidio  donde pagó tres años de cárcel, pero que por argucias  logró salir libre.

La razón de las ausencias en dos y tres debates fueron morales y éticas, donde nuestra candidata se negó  competir con personas que no tienen esas condiciones para hacer política.  

¿Qué debilidades cree que tuvo la campaña?

O. B. La económica. La señora Rosmery no tienen riquezas, es una persona modesta que vive dignamente y ha vivido de su salario nada más. No tuvimos un solo donante,  eso fue difícil. Pero nosotros pensamos que las campañas se deben de hacer con ideas y con programas no con el derroche de dinero como se vio  en otras campañas 

¿Ejes fundamentales del programa de gobierno?

O.B. Lucha frontal contra la corrupción. Este es el principal problema que tiene el país y el departamento, donde los recursos para obras e inversión social se los roban. Tenemos que acabar con esta tragedia.   

La educación. Construir o reconstruir la infraestructura de las escuelas y colegios de los municipios que está en mal estado. La calidad de la educación es otro punto para tener en cuenta.

Salud. El compromiso con una solución definitiva al problema del hospital Federico Lleras y poner en marcha el del Limonar con un gran centro de urgencias.

Vivienda . Desarrollar un plan realizable para el fomento y construcción de vivienda tanto en el sector rural como urbano de los 47 municipios del Tolima.

Las conexión con todos los municipios y acabar con el divorcio que existe entre la administración central del departamento y las municipales.

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Lucha contra la miseria, la inclusión de jóvenes, niñez,  y  personas adultas y de todos los sectores minoritarios de la sociedad,  donde quepan los indígenas, afros, población LGTBI, entre otros.

Igualmente, la alianza con empresarios y el sector privado para volver al Tolima productivo y competitivo. 

¿Cuáles serían los cambios fundamentales en su estilo y programa de gobierno  frente a la actual administración?

O.B. Será totalmente distinto, comenzando porque es una mujer la que va a dirigir los destinos del departamento, en contacto directo con la ciudadanía. Será una gobernadora con liderazgo frente a los retos.  

Será un gobierno totalmente opuesto al actual, porque no será hegemónico ni de camarillas. Los cambios de estilo como de actuar, serán totalmente diferentes. Habrá un cambio radical.