Sería bueno que dentro de la serie de denuncias que anunció el alcalde de Ibagué, Andrés Fabián Hurtado contra varios candidatos a la Alcaldía de Ibagué y a periodistas, hiciera lo mismo contra la funcionaria del CTI de la Fiscalía del Tolima, Omaira Méndez Lozada, cuyo esposo e hijo tiene millonarios contratos con la Administración local, a través de una empresa de seguridad.

Y es que la contratación no tuviera nada de malo, si la integrante del grupo investigador de la Fiscalía no fuera la esposa de Jorge Oswaldo Castaño, y madre de Jorge Alejandro Castañeda, propietarios y representantes legales de la empresa de seguridad Sara Ltda., entidad con quien la Alcaldía de Ibagué, ha celebrado contratos a dedo por cerca de mil 700 millones de pesos, desde el año 2021 hasta la fecha, de acuerdo con la denuncia que hizo el hoy candidato y diputado, Marco Emilio Hincapié.

Para tener en cuenta, la funcionaria del CTI ha participado en investigaciones contra el alcalde Hurtado tales, como el uso indebido de la pista del  aeropuerto Perales en el famoso caso conocido de ‘piques ilegales’. Recordar, que en este impresentable suceso se perdieron y manipularon pruebas contra el mandatario local. La señora Omaira Méndez Lozada, no tuvo la delicadeza ni de declararse impedida para participar como investigadora en este caso, tal y como lo acaba de denunciar el diputado Hincapié.

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Se trata de una denuncia que reviste suma gravedad, si tenemos en cuenta que la Fiscalía debe tener la suficiente y plena autonomía para investigar a sus aforados, como el caso del alcalde Hurtado, y ninguno de sus funcionarios debería tener relaciones contractuales con sus investigados como en este caso.

Este tipo de contrataciones con familiares cercanos, pero muy cercanos, de una  funcionaria de la Fiscalía que investiga al alcalde Hurtado, deja, al menos, un tufillo de que algo anda mal en esta entidad, pues las investigaciones se tuercen y terminan como la de graves irregularidades en el caso específico de los piques del aeropuerto Perales, o se engavetan.

Este proceder le quita legitimidad a la justicia, pues da a entender que con el otorgamiento de contratos a los familiares de funcionarios que investigan al Alcalde, se sepultan los procesos, y el cuestionado y sibilino personaje queda incólume, libre de toda sospecha y responsabilidad.

Este proceder, es también, una compra-venta descarada de justicia.

Valederas y la Fiscalía Tolima debe responder a las preguntas que se formula el diputado y candidato a la Alcaldía de Ibagué, Marco Emilio Hincapié:

¿En qué investigaciones por delitos contra la administración pública que vinculan al alcalde Andrés Hurtado ha participado la funcionaria Omaira Méndez Losada?

¿Por qué la contratación en la USI ha estado monopolizada por un único proponente que, casualmente, es una empresa familiar cercana a la investigadora del CTI Omaira Méndez Losada?

¿La funcionaria Omaira Méndez Losada declaró el conflicto de intereses para investigar a Hurtado debido a los contratos de sus familiares con la USI?”.

Por eso, le pedimos alcalde Hurtado, que no solo amenace con denunciar a candidatos a la alcaldía y periodistas que cuestionan su oscura y pésima administración, también debe denunciar a quienes le ‘ayudan’ en la Fiscalía Tolima para que pueda seguir tapando sus pecados.

Las ayudas del Socio

Pero el alcalde Hurtado, también debe de denunciar o, al menos, aclarar las relaciones que tiene uno de sus candidatos al concejo de Ibagué, y que a su vez, apoya a su candidata a la alcaldía Johana Aranda. Nos referimos a Felipe Martínez, quien en noviembre del año pasado apareció haciendo campaña política y entregando regalos en compañía de Eduardo Restrepo Victoria, conocido con el alias de ‘El Socio’, quien en el 2006 fue extraditado a Estados Unidos donde pagó una condena de 4 años y medio por narcotráfico y nexos con el Cartel del Norte del Valle del Cauca.

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Desde aquella fecha y hasta el momento, tanto el alcalde Andrés Hurtado, como su candidata a la alcaldía de Ibagué, Johana Aranda, no han pronunciado una sola palabra sobre este acompañamiento político. 

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Estas y otras respuestas, les debe el alcalde Hurtado a la sociedad ibaguereña. Por ejemplo, de ¿dónde sale tanto dinero para la vida de jeque petrolero que lleva el alcalde Hurtado, con un sueldo de 18 millones de pesos?. ¿De dónde sale el dinero para comprar una mansión de miles de millones de pesos en un exclusivo sector de Ibagué?, lo mismo para las costosas cirugías plásticas, su ropa de marca, los costosos viajes al exterior y regalos a sus hijos y familiares, las ostentosas fiestas privadas con artistas de talla nacional e internacional, entre otros lujos y extravagancias del mandatario local.

Qué se sepa, hasta el momento no se ha ganado ni un Baloto. Solo se recuerda que hace apenas pocos años, era un modesto funcionario del IBAL y las prendas más caras que lucía eran unos tenis Croydon.