Por: Juan José Hernández

Es difícil darse cuenta de que el mejor tenista que ha tenido la historia no volverá a aparecer en las canchas. Es difícil imaginarse el tenis, sin la magia de Roger Federer. Su Majestad se va después de conseguir: 20 Grand Slam, 103 títulos, 6 Masters Final ATP y 28 Masters 1000 y un oro olímpico en Pekín 2008. Fue considerado el número uno durante 310 semanas. No se va un gran tenista, se va el mejor.

El fin de una era. El fin de las mañanas y tardes mágicas viendo jugar a un tenista a otra cosa. Un jugador que ojalá fuera eterno, pero todo comienzo tiene su final y lamentablemente, el día tuvo que llegar. La leyenda del tenis de 41 años apareció en las canchas por última vez este pasado viernes como profesional junto a Rafael Nadal (la mayor rivalidad y respeto en la carrera de Federer) en un partido de dobles en Londres en la Laver Cup.

Entre lágrimas, Roger Federer dijo adiós al tenis tras haber jugado su último partido como profesional. Una de las imágenes probablemente más tristes del deporte. “Ha sido un viaje maravilloso que repetiría, este es el final, los amo, así que gracias” dijo el suizo en su discurso de despedida. “Cuando Roger Federer se va, una parte de mi vida también se va”, dijo Nadal, quien tampoco pudo contener el llanto y la tristeza por la partida de Federer.

El suizo debutó en el listado profesional el 22 de septiembre de 1997, con 16 años, como el número 12 de su país y el 803° del mundo. Quien diría que el pequeño gigante, batiría récords absurdos y se convertiría en una deidad en este deporte. Que más se le puede pedir a un hombre que nos cautivó con su magia durante 24 años. Tantos años llevando al tenis a otro nivel. Un deportista de otro planeta. Ídolo y referente de muchos. Un crack dentro y fuera de las canchas.

El anuncio de su retiro llegó como baldado de agua fría. El 15 de septiembre y el 24 del mismo mes, serán recordados como el adiós a la leyenda, como el adiós al rey del tenis. No habrá nadie igual o más grande que Roger Federer. No alcanzan las palabras para agradecer todo lo bueno que ha hecho Federer no solo por el tenis, sino también por el deporte en general. Fácilmente, podría ser reconocido como uno de los mejores deportistas de la historia.

Un antes y un después en la historia del deporte. Un chico que se volvió gigante y forjó su propio legado. Se acabó el recital, se acabaron las funciones de Federer, se acabaron los partidos legendarios. Durante más de dos décadas estar en la cima no es fácil, pero Federer lo hacía parecer que sí.

La historia de Roger Federer quedará en la memoria de todos los amantes del deporte.  ¡Una verdadera máquina ganadora! Gracias por todos los recuerdos, alegrías y tristezas que nos has dado, gracias sencillamente por haber jugado a este deporte.  El fin de una carrera histórica, Gracias Roger Federer.