El índice de felicidad neto se logra restando el porcentaje de las personas que dicen estar infelices al de las personas felices y ese listado es liderado a nivel global por Fiyi, el país insular ubicado en Oceanía, con 89 por ciento. Debajo de Colombia se encuentra China, con 79 %, mientras que Irak se mantiene con el índice más bajo, con menos del 1 %.

Para obtener los resultados, se exploraron las expectativas, la visión y las creencias de 68.759 personas mayores de 18 años en 69 países del mundo. Una de las preguntas que se les realizó fue cómo se sentían, en general y personalmente, entre muy feliz, feliz, ni feliz ni infeliz, infeliz o muy infeliz con su vida.

El promedio global se ubicó en 59 por ciento, 28 puntos por debajo de lo mostrado por Colombia.

Al interior del país, la región Atlántica se muestra como la más feliz, con un índice neto de 89 por ciento. Luego están la región central y otros territorios (88 %), Bogotá (87), el Pacífico (86) y al final los departamentos de oriente (80).

En Colombia y los otros países encuestados, las mujeres dijeron ser más felices que los hombres. La variación de los porcentajes entre los diferentes grupos de edades es muy pequeña, pero existe una tendencia a la disminución a medida que aumenta la edad de las personas.

No obstante, en otro apartado de la encuesta, los colombianos dijeron ser menos optimistas frente al 2017 que otros países. Mientras el índice de optimismo neto (que se obtiene de restarle a los optimistas los pesimistas) en el mundo fue de 37 por ciento en promedio, en Colombia se ubicó esa cifra en 18 por ciento, 8 puntos menos frente al año pasado.

En materia económica los encuestados colombianos se mostraron pesimistas. El 25 por ciento tiene altas expectativas frente a la prosperidad frente al 36 por ciento que considera que será un año de dificultades monetarias y el 37 que cree se mantendrá de la misma manera que el 2016.Al comparar el índice neto en este tema, Colombia es el país con menos esperanzas de crecer de la región latinoamericana.

El dato es diciente, pues en ese aspecto el promedio mundial que se mantiene optimista frente a la prosperidad económica es de 42 por ciento y el porcentaje de pesimistas llega apenas al 15 por ciento.