Según lo declarado por el testigo en entrevista con la periodista Cecilia Orozco Tascón de la Revista Raya, el domingo 3 de agosto. Un mar de irregularidades rodea el internamiento de José Leonairo Dorado Gaviria, exsargento de inteligencia militar y testigo clave ante la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), en una clínica psiquiátrica donde fue medicado con sustancias que le impidieron mantener el control pleno de su cuerpo.

Su internamiento sin justificación, ni notificación previa a su familia, a su abogado defensor ni a la JEP, se dio en julio, pocos meses después de que revelara la existencia de fosas comunes en la antigua sede de la Brigada 20 del Ejército en Bogotá, donde en marzo de este año hallaron gran cantidad de restos humanos, al parecer víctimas del área de Inteligencia del Ejército Nacional a la que perteneció José Leonairo.

“Operábamos casi total impunidad”, le aseguró el exmilitar en entrevista con Cecilia Orozco para la revista Raya.

• En Otras Noticias: El crudo testimonio de un exmilitar que cometió falsos positivos en el Tolima.

Internamiento ilegal

La hija de José Dorado fue informada de que su padre había sido enviado a una clínica psiquiátrica y alertó a medios de comunicación, a la Procuraduría y a la Defensoría del Pueblo, quienes exigieron verlo y terminaron comprobando que el testigo, pese a que padece graves quebrantos de salud, su estado mental estaba en perfectas condiciones.

Un testigo clave

Dorado ha sido pieza clave en las investigaciones sobre desapariciones forzadas, falsos positivos judiciales y vínculos entre inteligencia militar y narcotráfico. Ha declarado que dentro del Ejército operaba una macroestructura criminal que judicializaba, desaparecía y asesinaba a personas consideradas “inconvenientes” para su estrategia de guerra, con el fin de inflar resultados operacionales y recibir financiamiento del Plan Colombia.

“Los generales presentaban esos resultados para que los agentes estadunidenses dieran plata a través del Plan Colombia y lo hacían para motivar la guerra… No era por motivos ideológicos, era por intereses económicos personales”, expresó Dorado, a la periodista Cecilia Orozco. 

• También Puede Leer: Condenado a 60 años de cárcel por 14 falsos positivos en el Tolima.

Aunque ya fue dado de alta y regresó al centro penitenciario militar donde cumple una condena de 40 años por secuestro, Dorado denuncia que no le han brindado la seguridad que la JEP ordenó para él y que aún no le han entregado su historia clínica. Afirma que, pese a haberla solicitado formalmente, le respondieron que solo la dirección del penal tiene derecho a conocerla, no él como paciente e implicado, debido a su condición de recluso.

Entrevista: Cecilia Orozco; Revista Raya.