A medida que todas las regiones del planeta se recuperan de las crisis asociadas a la pandemia mundial y conflictos políticos, la situación fronteriza vislumbra un horizonte. A lo ancho del mundo, se están gestionando regulaciones para el ingreso de personas extranjeras.

La región europea no es una excepción en este sentido, pese a que algunas zonas se ven afectadas por enfrentamientos. Sin embargo, se están habilitando distintos visados y autorizaciones en vistas a la normalización de los desplazamientos desde 2023.

La visa Schengen y el permiso de ingreso ETIAS son dos regulaciones que podrían ser determinantes para el flujo de viajeros en el continente. A continuación contamos cómo funciona cada una.

Visa Schengen

La visa Schengen es aquella que permite el ingreso temporal de extranjeros en toda la región Schengen, que hoy abarca 26 países del continente europeo. El conjunto de Estados encuentra sus orígenes en 1985, cuando algunos de ellos establecieron una política común para el control fronterizo.

¿Cómo se tramita la visa Schengen?

Para obtener esta, visa, que posibilita una estancia de 90 días en total dentro de la región, debemos seguir algunos pasos:
1. Reunir los requisitos: pasaporte vigente, reserva de pasajes de ida y vuelta, reserva de hospedaje y documentos de apoyo (carta de invitación, extractos bancarios, etc).
2. Completar el formulario de solicitud: debemos imprimirlo y firmarlo, para luego adjuntar junto con dos fotos tipo pasaporte.
3. Reunir los documentos y pedir cita con la embajada o consulado del primer país de destino.
4. Contratar un seguro médico para la visa Schengen.
5. Abonar la tasa de la visa Schengen.
6. Asistir a la cita diplomática.

Autorización ETIAS

¿Qué es?

La autorización ETIAS por su parte, que se traduce como Sistema Europeo de Información y Autorización de Viajes es un permiso para quienes no necesitan visado. Se trata de los ciudadanos de más de 50 países que, desde noviembre de 2023 deberán contar con este permiso para ingresar a Europa.

¿Cómo solicitar?

A diferencia de los visados, la solicitud debe realizarse en línea, aunque con el prerrequisito de contar con un pasaporte biométrico vigente. Si bien muchos países firmaron acuerdos con la Unión Europea, esta autorización de ingreso será un requisito para viajar a la región Schengen.

Como mencionamos, el proceso de solicitud es bien sencillo, aunque necesitamos reunir ciertos requisitos. Además de un pasaporte biométrico con una vigencia mínima de tres meses al momento de llegada, debemos contar con una correo electrónico para recibir el permiso.

Formulario y pago

También es necesario tener una cuenta de débito o crédito para abonar el arancel de la autorización. Al realizar la solicitud, debemos completar un formulario en línea con datos personales y otras preguntas sobre nuestro estado de salud y antecedentes. De no tener problemas, recibiremos por email el permiso, que tendrá una validez de tres años.

Es importante destacar la relevancia de poder legitimar la información brindada con la documentación disponible al momento de ingresar a Europa. De lo contrario, podemos incluso perder la posibilidad de volver a viajar a la región.