Por sorpresa tomó a los comerciantes de Ibagué el decreto que expidió la Alcaldía, en el que ordenan la Ley Seca sectorizada y por horarios para la celebración de Año Nuevo y Día de Reyes. 

La administración de la alcaldesa Johana Aranda tomó la decisión en un Consejo de Seguridad al que convocaron por los cuatro homicidios registrados en la celebración de Navidad. 

Sin embargo, comerciantes de la ciudad le manifestaron a El Cronista.co su inconformidad con la medida, que tildan de injustificada y hasta absurda. 

"Se me hace absurdo. Es prácticamente decretar Ley Seca el 31 de diciembre y el primero de enero. Dicen que la medida se debe a los cuatro muertos que hubo el 24, como si seguro con esa medida no vayan a haber muertos el 31. ¿Entonces los otros días si está permitido que la gente se mate?", cuestionó un empresario de la ciudad, comerciante dedicado a la venta de licor. 

Y agregó que: "Sería casi la única ciudad en el mundo que en decretar la Ley Seca ese día. Se me hace una medida muy lesiva para todo el comercio; es como si fuera de esos horarios sí estuvieran permitidos los homicidios y las riñas".

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La medida establece que los días 31 de diciembre, y primero, 5 y 6 de enero, estará prohibida la venta y consumo de licor en tiendas y supermercados, de 5:00 de la mañana a las 12:00 del mediodía. 

Sin embargo, también establece que los días 28 y 31 de diciembre, y el 4 de enero, pueden abrir hasta las 5:00 de la mañana, pero solo los establecimientos ubicados en la avenida Mirolindo y centros comerciales. Medida que también fue cuestionada. 

"No es equitativo para todos. Me parece que no debería ser sectorizado. Le están dando la oportunidad solamente a unos pocos, y son los que más posibilidades económicas tienen en Ibagué. Me parece mal esa medida", expresó Alexis Duarte, administrador de un bar en el barrio La Francia. 

Ambos comerciantes coinciden en que la inseguridad y riñas continuarán, pese a las medidas de la Alcaldía.