Mariana Díaz tiene nueve años de edad, desde los 7 años compite en las diferentes pistas nacionales y desde el 2015 es deportista federada. Semana tras semana en conjunto con uno de sus padres busca los espacios físicos donde pueda practicar el deporte de su gusto, el patinaje. Hoy ya piensa en el retiro, se cansó de luchar por algo que cree tiene derecho como niña, como deportista.

No es para menos, pertenece a los clubes del colegio Liceo Nacional y Sky Line, pero su financiación se da gracias al grupo “PAMA”. Papá y mamá como dice José Alonso Díaz Peñalosa su papá. Díaz Peñaloza representó al Tolima en su juventud en la disciplina de baloncesto y sus condiciones eran totalmente diferentes como lo contó al cronista.

Haciendo cuentas son más de 500 mil pesos mes destinados a Mariana en la práctica del deporte. Cada 20 días compran un juego de llantas por 180 mil pesos. Cada 15 días se visita la pista de patinaje más cercana ubicada en el municipio Girardot donde se invierten 100 mil pesos aproximadamente, 80 mil en transporte y 20 en arriendo de la pista, más uniformes, rehidratación y traslado a la pista del barrio Piedrapintada, un multideportivo que genera riesgos para los deportistas en general, debido al entrenamiento de manera simultánea de varias disciplinas. Ejemplo de esto, es cuando entrenaba Mariana se tropezó con un balón de voleibol generándole una fisura en una de sus extremidades.

Lo curioso del asunto es que unas llantas duran en una pista profesional  promedio entre 4 a 5 meses. Pero para el caso de Ibagué es cada 20 días, máximo un mes, debido a que los terrenos donde deben practicar el deporte son acaba llantas como lo explica Díaz Peñaloza.

Otro espacio de prácticas es la variante a Ibagué, lugar donde quince días antes se registró un accidente de 8 deportistas, dejando al descubierto lo que todos sabemos, no hay donde practicar ningún deporte.

Guillermo Moreno, técnico de la selección Valle de baloncesto y la selección Colombia rama masculina en el pasado nacional de basket realizado en el mes de julio en los coliseos de la universidad del Tolima y SENA expresó su tristeza por la realización de un campeonato nacional en espacios no adecuados ni motivadores para la realización de estas justas, vitrina para el Tolima ante el país.

Se perdió la memoria competitiva y las posibilidades de ir a campeonatos como el suramericano

De 15 a 20 medallas en cada encuentro nacional el Tolima pasó a un máximo de 3 preseas en cada torneo en el 2016. De las competencias programadas por la Federación Nacional de Patinaje se participa en un promedio de 4 torneos al año.

Los resultados que se generan en la actualidad es debido a la falta de escenarios adecuados para los deportistas y pese a contar con una pista terminada tal como se muestra en este sobrevuelo hecho por la organización lunarvi y que usted puede apreciar en este vinculo,  este espacio no está habilitado para su uso debido a los problemas que registra la infraestructura metálica preparada como gradería, ya que de acuerdo a la Personería e Imdri no genera seguridad pudiendo ocasionar un daño mayor.  Más los problemas técnico jurídicos que registran los escenarios a entregar para los juegos nacionales 2015, lo que iban a ser los mejores de la historia de Colombia.

Alonso Díaz afirmó que se perdió la memoria de los entrenamientos, argumenta desde la técnica este planteamiento porque una pista reglamentaria tiene 200 metros, son 15 a 16 pasos en las rectas que dan generalmente las patinadoras y entran a la curva con mayor seguridad. Al entrenar en la media pista del barrio Piedrapintada las deportistas cuentan con 85 metros para hacer todas las maniobras, es decir en la recta ya con tres pasos que den llegan a la curva, haciendo que se pierda la pericia y maestría al momento de competir contra niñas que si cuentan con todas las herramientas para hacer un buen entrenamiento. De allí los resultados.

Para diciembre de 2015 el Tolima tenía asegurada la representación como seleccionadas de Colombia en el suramericano a realizarse en el Valle del Cauca, pero debido a los pobres resultados este año fueron borradas de la lista de representantes al más importante torneo para muchas de ellas en su vida. Otro sueño que se trunca.

Deserción y fuga de talentos para otras ligas

La mejor patinadora tolimense Adriana Celemín tuvo la oportunidad de entrenar el año anterior en canchas de Europa, hoy pertenece a la liga de Bolívar donde cuenta con el apoyo de las autoridades locales y regionales. Otras tres más alistan maletas.

De acuerdo a Díaz Peñaloza 30 patinadoras ya se retiraron porque no aguantaron ni el ritmo, ni las condiciones actuales. Así andan los otros 11 clubes de patinaje de Ibagué, y de municipios como Guamo, Espinal, Líbano, Chaparral e Icononzo. Son desplazados por cuenta de la mala planificación, corrupción y falta de escenarios, reiteró el papá de Mariana.

Otros deportes tienen el mismo problema.

 Su otra hija se inclinó por el voleibol y vive una situación similar, los implementos son básicos, cancha, malla o red, balón y dotación. Pero la verdad es otra, tienen que pagar los padres para que sus hijos puedan entrenar. Se convierte entonces esta y otras disciplinas en excluyente como lo dijo Alonso porque solo juegan quienes tienen plata, dejando a muchos talentos de padres con escasos recursos sin la posibilidad de practicar lo que les gusta.  Deportistas talentosos que podrían darle al Tolima muchos éxitos.

Al encarar al presidente de la liga de Voleibol éste le expresó que necesitan de la plata de los padres para poder funcionar porque con la plata que dan para entrenadores no alcanza a cubrir las necesidades de la liga.

Recordó cuando fue selección Tolima en baloncesto y contaba no solo con las herramientas mínimas para entrenar sino con el reconocimiento y respeto de los dirigentes pese a que el PAMA también existía. Papá y mamá son la constante en todos los deportes y en el país como lo dijo James Beltrán, tolimense quien tiene su hijo en la liga de baloncesto de Bogotá.

En baloncesto el mismo presidente de la Liga     John Jairo Ortiz en su perfil de Facebook escribió: “Hoy quiero felicitar a este grupo de guerreras, a los padres de familia a los entrenadores por no parar en las competencias nacionales a pesar de que nosotros como liga no pudimos apoyarlas económicamente en nada para la participación de este torneo nacional, están haciendo presencia, espero retribuir este esfuerzo en la próxima competencia para unificar esfuerzos y que todo sea equitativo bendiciones y éxitos”..... Se trata de la selección Tolima sub 15 femenino que representa el departamento en el torneo nacional en la ciudad de Popayán.

No hay patrocinios a la vista

Parece que los empresarios de la región solo están interesados en patrocinar equipos de fútbol, algunos de baloncesto y voleibol. Padres de familia han visitado empresas importantes con la misma respuesta para otras disciplinas “NO gracias, en otra oportunidad”.

Muchos padres maldicen la elección de Ibagué para los juegos nacionales del año 2015. Resultó una verdadera procesión para deportistas y sus familias. Acabaron con las canchas del complejo deportivo de la 42 con 5ta, acabaron con los escenarios del Parque Deportivo, acabaron con el deporte, dijo Pedro Rodríguez, papá de un waterpolista quien también vive su propio calvario.

Lo único cierto es que COLDEPORTES ha pasado agachado en esta triste historia con final contado antes de iniciar los estudios arquitectónicos y presuntos responsables como el abogado Arciniegas hacen de las suyas para salir libres en menos de 30 días, plazo máximo en el vencimiento de términos.

Pasará más de una década para que el deporte tolimense recupere no solo espacios físicos sino la confianza en competencias nacionales. Porque esto no es de un año a otro, es un trabajo que inicia desde muy niños y viene a dar frutos entre los 15 a 20 años como lo dijo el profesor Guillermo Moreno, autoridad en el deporte.