Por Ricardo Oviedo Arévalo
*Sociólogo, historiador, docente

En la noche primaveral del 15 de mayo de 2011, en innumerables plazas de España, decenas de organizaciones de la sociedad civil acompañadas espontáneamente por grupos de ciudadanos inconformes por el manejo bipartidista del Estado, por parte del PSOE, y el PP, en especial, en cuento al manejo bipartidista asfixiante, la limitada división de poderes, la creciente corrupción política, ante el excluyente dominio de los bancos y el rechazo del mandato de “ajuste” de la Comisión Europea, estas directrices habían disparado los indicadores de precariedad social, que tenían como base la austeridad, el rescate financiero a la banca y un enorme recorte  a las políticas sociales, en últimas el 15-M, exigía un cambio en la conducción del Estado y de sus  políticas neoliberales, que contenían un fuerte tufillo a las políticas de la dictadura franquista.

De la jornada de un día, se pasó por voluntad popular, a la toma indefinida de la plaza pública, de la quietud social imperante a la lluvia de ideas, de líderes anónimos a locuaces dirigentes del desespero ciudadano, académicos, tenderos, estudiantes, amas de casa, juventudes, destechados- okupas- endeudados por hipotecas, pensionados y miles de trabajadores que no les alcanzaba su sueldo hasta el final del mes, se agruparon en decenas de colectivos según los temas de interés de los protestantes, poco a poco la protesta cívica se transformó en movimientos políticos, surgió en su seno el Partido X, y en el 2014, el Movimiento Podemos, que agrupaba fundamentalmente estudiantes y profesores de la universidad Complutense de Madrid y luego se sumaron mayoritariamente simpatizantes del llamado M-15, dando como origen un exitoso partido progresista, que surgió en la calle y no en los salones de exclusivos clubes sociales o logias, sus líderes en vez de políticos profesionales eran gente del común,  profesores catedráticos como Pablo Iglesias y Juan Carlos Monedero, jóvenes que habían estudiado en las mejores universitarias europeas y también precarizados por estas políticas neoliberales.

Influenciados por acontecimientos como la primavera árabe (2010), las protestas de Grecia (2012), el movimiento Occupy (2011) de los Estados Unidos, pero también por las movilizaciones sociales de Latinoamérica como el Movimiento Yo soy 132, de México (2012), los levantamientos populares de Colombia, Venezuela, Argentina y Chile,  surgieron como dirigentes  de estos nuevos liderazgos; uno de sus más destacados miembros es el politólogo  y profesor de la Universidad Complutense, Juan Carlos Monedero, que tenemos el honor de su visita este viernes 12 de septiembre en la ciudad de Ibagué, invitado por el comité Ambiental del Tolima, SIMATOL, el Observatorio del Tolima y el movimiento Causa Común, el motivo, el lanzamiento de su última obra, “Políticas para indiferentes”.

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Juan Carlos, estudió su bachillerato en colegios religiosos y en sus tiempos libres ayudaba a su padre (conservador) en su negocio familiar, estudió ciencias políticas en la Universidad Complutense de Madrid.  En 1989, hizo sus estudios de doctorado en la prestigiosa Universidad de Heidelberg (Alemania), tres años después ingresa como profesor de Ciencias Políticas en la Complutense de Madrid, dictando las asignaturas de: Teoría del Estado, Sistema político de España, América Latina y globalización, es asesor internacional y polémico tertuliano de temas políticos y de gobierno.

Este libro desarrolla como tesis central devolverle la política a la gente como herramienta de autoayuda colectiva, teniendo en cuenta, el diseño de una visión global de resistencia contra las políticas globalistas y violentas contra nuestra sociedad, analiza el manejo perverso de la información como última muralla del establecimiento y sus privilegios,  manipulando y moldeando la opinión pública, el surgimiento de las redes sociales y las fake news (Noticias falsas) y  los peligros de la naciente Inteligencia Artificial, que terminan convenciendo a los pobres de votar en su contra, apoyando y validando, de esta manera, las propuestas de recortes y precariedad social.

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Monedero, propone durante todo el texto la tesis gramsciana de que lo cultural y la conciencia, es una premisa fundamental para el cambio, todo lo anterior, analizado bajo la hipótesis de que cuando teníamos las respuestas nos cambiaron las preguntas. Por lo tanto, es un honor tener a Juan Carlos en la ciudad musical acompañándolo en el lanzamiento de su último libro, “POLÍTICA PARA INDIFERENTES”, un tema de gran interés para todos nosotros, en un país que está luchando por encontrar nuevos caminos. El viernes nos ¡vemos!