Por estos días leí en el portal EL CRONISTA dirigido por el periodista Humberto Leyton, un artículo  que titula el retorno al estudio de MARX y nos retrotrae a un discurso del exsenador y exministro tolimense Alberto Santofimio Botero, quien en una intervención ante la Academia de Historia del Tolima hace 20 años, planteaba “elevar el debate de las ideas y volver los ojos para repensar en la sociedad, para ello, es indispensable volver al estudio de la obra de Carlos Marx."  Resaltaba como vigentes la dialéctica como manera de entender el mundo, la crítica férrea a la explotación y la manera de entender cómo se genera la riqueza de las naciones entre otros postulados.

Este artículo publicado en el libro del mismo autor Palabras y Sueños,  me hizo rememorar las épocas grandes de nuestro Partido Liberal en el Tolima y Colombia, cuando en las plazas públicas de nuestro departamento y nuestro país,  con lleno total el doctor Alberto hacía vibrar los multitudes con su gran propuesta “la patria socialista del mañana” y como diría nuestro fundador Ezequiel Rojas, "para que el liberalismo sea alternativa de poder debe beber de las fuentes del socialismo”.

Desafortunadamente hemos abandonado esa lucha y eso nos ha postrado, nos ha relegado a ser un simple comodín marginal de componendas políticas para mantener el statu quo, dicho en sus palabras doctor Alberto “nos olvidamos de luchar por  conquistar el bienestar, la felicidad y la igualdad social para los ciudadanos del mundo”.

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Hoy esa falta de consecuencia ha permitido que el oscurantismo, la derecha y la exclusión se hayan empotrado en nuestra patria, poniendo en dificultades los derechos, garantías y las libertades por las que muchos dieron su vida, su sangre y su sudor.

Hoy la pandemia del covid-19, develó este sistema económico perverso que está destruyendo al mundo depredando su naturaleza, que con la avaricia desmedida deja a la gran  mayoría en la famélica pobreza y la miseria extrema y que promueve la guerra para eliminar el contrario; así es considerado quien reclama un mundo más justo, un enemigo, un agente del desorden, un enviado del mal que hay que eliminar (como le  ocurre a los líderes sociales en este país, víctimas de esta otra pandemia).

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Doctor Alberto Santofimio, acojo su provocador reto y acudo a su mente lúcida, a su gran inteligencia, a su gran valor intelectual  y su extensa experiencia para que desde sus cuarteles de invierno nos ayude a iluminar el camino. Nos anime con su producción intelectual  y nos nutra con su sabiduría el renacimiento de un partido alternativo, de un programa que reivindique a las mayorías excluidas, que cuide el planeta,  que nos de  la paz y que recuperemos la grandeza intelectual, política y económica que merece nuestra raza Pijao.

A partir de este convocó a intelectuales, políticos dirigentes gremiales y sociales, estudiantes y ciudadanía en general,  a una gran cruzada por el rescate de la moralidad pública, la lucha por la democracia participativa, la paz con justicia social y  además de volver a Carlos Marx, los invito a nutrir sus reflexiones con  John Keynes, Thomas Piketty, Joseph Stiglitz y muchos más que con sus teorías, trabajos y experiencias buscan la construcción de un mundo mejor.