Este año la ciudad inició con una tasa de desempleo de 18.6%, lo que la convierte en la segunda capital del país con la cifra más alta detrás de Quibdó (20%), según datos del DANE.

Ibagué requiere una hoja de ruta que no abandone lo estipulado en los documentos Ciudad Sostenible 2037 y el Estudio de Competitividad elaborados por la Administración anterior. Allí se proponen como vocación económica del municipio: el ecoturismo, ser una ‘plataforma logística’, el agro, las TIC y la marca capital musical.

Para fortalecer el ecoturismo y consolidar a la ciudad como plataforma logística, Ibagué debería contar con una Agencia de Promoción e Inversión, que impulse la ciudad atrayendo recursos públicos y privados. 

Ésta podría estar conformada por la Alcaldía y la Cámara de Comercio, contando con el apoyo de la Asociación de Municipios del Centro del Tolima y el Comité Regional de Competitividad. La iniciativa, que en años anteriores tuvo avances a través la Secretaría de Apoyo a la Gestión y la CCI, debería definitivamente consolidarse en pro de los ibaguereños. 

En cuanto a la agroindustria, es importante ampliar la frontera agrícola en la meseta para cultivos de hortalizas y frutas como nuevas oportunidades de empleo; lo cual requiere contar con agua en condiciones aptas para su riego. Por esto desde 2019 se ejecutan con recursos del Municipio los estudios y diseños para la construcción de dos Plantas de Tratamiento de Aguas Residuales. 

• Puede leer: El turismo rural : una opción de desarrollo económico.

   

Respecto a la marca capital musical se podría impulsar el territorio como sede de sucesos de talla internacional en diversos géneros. Este camino ya inició con la innovación en eventos como el Encuentro Ibagué Hip Hop,  Ibagué Punk; Ibagué  Multicolor, Ibagué Festival, entre otros; además de la adquisición del escenario móvil cultural para presentaciones artísticas.

Finalmente, Ibagué debe continuar fortaleciendo el clúster TIC. Por su ubicación y como ciudad intermedia podría tener una ventaja comparativa en este campo;  siguiendo el modelo de Medellín, que hoy apuesta a consolidarse como “valle del software”. Para iniciar, es prioritario conformar un comité que integre a la universidad, la empresa y el Estado, formulando estrategias con un mismo fin. 

En su campaña, el alcalde Hurtado se propuso la ambiciosa meta de crear 30 mil trabajos. No obstante de momento se ha limitado a decir que incentivará 20 mil puestos a través de la construcción; un “plan de choque” contra los ambulantes en la tercera; además de despedir funcionarios hasta con quince años de antigüedad en la Alcaldía. 

*Politólogo, especialista.