Por: Carlos Orlando Pardo

Los 30 años que cumple de fundado el periódico Actualidad Tolimense y los 46 en que anda Pijao Editores, dan muestra en el campo de la comunicación, cada quien en su especialidad, de cómo existen esfuerzos que usualmente sin apoyo institucional, dan testimonio ejemplar del acaecer de la tierra en el campo de sus hechos y la literatura. Actualidad Tolimense, bajo la dirección del veterano y dinámico Jorge Torres, tiene huellas profundas en el tiempo, pues surge en un momento en que han desaparecido El Derecho y Combate, ante la muerte de los legendarios Floro Saavedra y Adriano Tribín, el primero y un ejercicio desatinado de Combate por parte de Mauro Huertas y un señor Alberto Holguín.

Evocamos con afecto la presencia de Heriberto y Antonio Hernández, que con entusiasmo pero un sistema obsoleto, iniciaron el periódico con tipografía y linotipo, pero que de todas maneras cumplió entonces su misión, aunque fiel a una línea conservadora, y que de semanario paso a diario durante tres años, pero con la llegada de Tolima 7 días y El Nuevo Día, sufrieron una crisis que los condujo al acabose. Pero fue transitorio porque la persistencia de hormiga arriera que ha tenido Jorge Torres, terminó reviviéndolo, junto a Enrique Cardozo y Jaime Orlando Santofimio.

Aleccionador resulta ver a Jorge Torres con el periódico bajo el brazo cumpliendo el papel de distribuidor de mano en mano y que comenzó como semanario durante largo tiempo, siguió su etapa quincenal y ha continuado su misión en medio de la crisis financiera que lo acosa. Pero ahí está gozando de vigorosa salud periodística con la colaboración en sus columnas de no pocas plumas destacadas y encarnando una voz independiente de los anunciadores y los oportunismos. Misiones como esta dejan huella en la historia regional y Actualidad Tolimense goza de buena salud, aunque con las debilidades financieras. Lo único cierto en medio de todas las consideraciones, es que  sigue vivo el sueño que empezara en octubre de 1989.

Pero también, en el campo editorial, la hazaña que ha cumplido Pijao Editores desde 1972 continúa, contando en su existencia con casi 600 títulos publicados, más de dos millones de ejemplares y la difusión de no menos de 500 autores, en particular los del Tolima. Investigar, estudiar, ubicar, editar y promover la literatura colombiana y la de la tierra, desde los viejos y desaparecidos maestros hasta los jóvenes, es la misión que cumplen convocando paralelamente congresos notables de nivel nacional o internacional, encuentros de escritores, lanzamientos de libros, seminarios y publicación de los nuestros en países como España, por un lado, así como suscitar su estudio en universidades norteamericanas, fuera de la promoción en ferias internacionales del libro.

El que escritores tolimenses hayan obtenido más de 25 premios nacionales e internacionales de literatura, el que hayan sido objeto de estudio critico en el país y el exterior, generan una marca de calidad por encima de lo regional y de sentimentalismos. Este tipo de acontecimientos a los que pocos les paran atención, ha sido una de las misiones de Pijao a lo largo del tiempo y que nos enorgullece comentarlo.