A través de comunicados y correos electrónicos, supuestos grupos paramilitares declararon objetivos militares a los directivos de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) Seccional Tolima y a dos miembros de la Juventud Comunista Colombiana que residen en el norte del departamento.

En un primer episodio, fueron amenazados todos los dirigentes sindicales de la CUT, mediante una carta dejada por debajo de la puerta de la sede de esa organización ubicada en carrera 5a No. 59-10 diagonal a la antigua clínica del Seguro Social (barrio La Floresta).

Entre los dirigentes más destacados, cuya integridad estaría en riesgo, figuran: Pedro Varón, presidente (foto), quien se encuentra incapacitado por una grave enfermedad; Miguel Ángel Ruiz, Vicepresidente, Héctor González,  Rosembertg  Bernal y Nelson Moreno, entre otros.

La carta está firmada por Las Autodefensas Gaitanitas de Colombia, pero no precisa nombres de los dirigentes sindicales, por lo que se entiende que los involucra a todos.

Paralelamente, a través de un correo electrónico con un lenguaje impublicable, fueron amenazados de muerte dos dirigentes de la Juventud Comunista Colombiana ‘JUCO’, seccional Tolima. Son ellos: Andrés Roldan Gómez, responsable del eje transversal de ambiente de la organización y Carolina Guevara Rincón, responsable del Frente de Masas Agrario y de la organización en general.

Frente a esta situación, la JUCO emitió un comunicado en donde se relata detalladamente las intimidaciones de las que han sido objeto sus líderes, y señala que “las amenazas hechas atentan contra su integridad personal, física, emocional y su dignidad humana, y están relacionadas con las actividades sociales y políticas que estos líderes juveniles adelantan en el municipio del Líbano, en torno a la defensa de los derechos humanos, la conservación del medio ambiente y la consolidación de la paz con justicia social”.

En el mismo documento se relata además las diferentes situaciones que habían venido atravesando desde hace algunos años varios de sus líderes y la manera como han sido hostigados. En ese sentido, la Juventud Comunista Colombiana exigió tanto al presidente Juan Manuel Santos, como al Gobernador del Tolima, Óscar Barreto Quiroga, que adelanten las acciones necesarias para garantizar la vida y la integridad física y moral de los líderes amenazados en el norte del departamento.

Igualmente exigen tanto a la Policía Nacional como a la Defensoría del Pueblo, que actúen eficazmente contra los autores materiales e intelectuales de estas amenazas y que se implementen los mecanismos de protección necesarios para garantizar los derechos fundamentales a las víctimas de estas amenazas.

Este tipo de amenazas denunciadas tanto por la Central Unitaria de Trabadores ‘CUT’, como por la Juventud Comunista Colombiana ‘JUCO’, no sólo se están extendiendo a todo el territorio nacional, tocando ahora al departamento del Tolima, sino que al parecer han venido aumentando y estarían siendo direccionadas hacía diferentes líderes que están apoyando los acuerdos de Paz pactados en La Habana, Cuba.

“Desde antes de la firma final y definitiva del acuerdo de paz entre el Gobierno Colombiano y la Insurgencia de las FARC – EP, se ha desencadenado una ola de crímenes y asesinatos contra distintos líderes de organizaciones sociales y políticas en distintas regiones del país, generado por fuerzas paramilitares activas bajo la negligencia del gobierno nacional para reducir estas amenazas, situación que agrava las condiciones para poder ejercer las libertades individuales y los derechos fundamentales que la Constitución Política y la Ley consagra para las/os colombianas/os”, señala parte del comunicado de la JUCO.

(Ver comunicado completo)

Frente a esta situación, se le indagó al Comandante del Departamento de Policía Tolima, Coronel Jorge Esguerra, quien señala desconocer la aparición tanto del panfleto contra los líderes de la CUT, como los correos y mensajes intimidatorios contra la JUCO. El oficial señaló que “es un panfleto muy general y no hay nada contra el Tolima”.

Sin embargo, ambas organizaciones señalan que harán lo pertinente para proteger a sus dirigentes, líderes juveniles, políticos, ambientalistas y campesinos, así como a los sindicatos, organizaciones de Derechos Humanos y de manera específica a los líderes amenazados del departamento del Tolima aquí mencionados.