El alcalde de Ibagué, Guillermo Alfonso Jaramillo, fue citado por la Fiscalía 53 Seccional para comparecer a interrogatorio este viernes, por el caso de la supuesta falsificación de la firma de Gabriel Jaramillo Roncancio, primo del mandatario local.

Como se conoce, el pleito es originado por una escritura de legalización de una servidumbre por donde tendría que pasar un canal de agua del río Sabandija a una finca ubicada en zona rural del municipio de Armero, perteneciente al alcalde de Ibagué, quien fue acusado formalmente por los presuntos delitos de fraude procesal y uso de documento público falso.

Según se conoció, el mandatario fue citado junto a su esposa, la primera gestora del municipio, Vilma Gómez de Jaramillo, a la diligencia judicial que se cumplirá hoy a las 4:00 de la tarde en el bunker de la Fiscalía ubicado en El Papayo, en donde deberán comparecer con abogado.

Según lo que se tramita en el expediente número 734086000482201600110, al alcalde de Ibagué se le sindica de haber cometido supuestos delitos en la legalización de la servidumbre en la finca que adquirió con su esposa, los cuales deben ser investigados por la Fiscalía, según lo advirtió en su momento el reconocido abogado Jaime Granados, quien fue el encargado de denunciar penalmente al mandatario local, el pasado 2 de agosto. La suma que se le canceló al famoso abogado para instaurar este proceso, siempre ha estado en duda, pues se conoce que el contratante no tiene los recursos necesario para pagar un togado de tal categoría, y es el único de la familia de ocho o más hermanos, que se opuso a esta negociación.

Pese a estas acusaciones, el alcalde de Ibagué siempre ha sido enfático en que no es cierto que haya falsificado la firma de Gabriel Jaramillo y que no tiene ningún inconveniente en atender cualquier llamado de las autoridades, para así comprobar que no hubo tales delitos. Es de recordar que el togado Granados asumió el caso luego de aparentemente haber sido buscado por uno de los hijos del fallecido primo del alcalde. Sin embargo, algunas versiones señalan que detrás del caso habría detractores del mandatario patrocinando dicha denuncia.

En su momento y públicamente, el abogado Jaime Granados, señaló que el alcalde Jaramillo “podría haber cometido un concurso de delitos que lo pueden llevar a una pena que supere los 12 años de prisión”, debido a que en la legalización de una servidumbre utilizando la firma de una persona fallecida, aparente “se dio el uso de documento público falso”.

Frente a estas acusaciones, el abogado Gonzalo Parra González, quien confirmó la realización del procedimiento judicial en la Fiscalía 53, ha manifestado que será el apoderado del alcalde Guillermo Alfonso Jaramillo y de su esposa, en un proceso que según él, apenas inicia. Parra, quien adelantó el trámite de la escritura, emitió una declaración pública hace algunos días, manifestando que: “este escándalo efectivamente tiene que ver con especulaciones y malas intenciones de personas que quieren ver al mandatario local tras las rejas”.

El comunicado emitido por el abogado Gonzalo Parra manifiesta puntualmente:

“La entrevista que dio el Dr. Jaime Granados a la revista Cambio In y que están difundiendo por internet, en relación con la supuesta conducta delictiva cometida por el Dr. Guillermo Alfonso Jaramillo, no son más que especulaciones acompañadas del deseo que muchos de sus detractores tienen de verlo entre las rejas; pero se equivocan quienes creen que por el hecho de estar al frente de la denuncia un prestigioso abogado, como lo es el Dr. Granados, la Fiscalía va a condenar sin antes investigar lo sucedido.

Pueden estar tranquilos los ibaguereños y tolimenses, que la conducta desplegada por el Dr. Guillermo Alfonso Jaramillo no constituye delito, pues no es cierto que haya falsificado la firma o la huella de quien en vida le otorgó la servidumbre de tránsito para llevar agua desde el río sabandija hasta un predio de su propiedad en Armero. Las firmas y huellas corresponden a cada una de las personas que intervinieron en el contrato, otra cosa es que el documento haya sido enumerado y fechado en época distinta a la que realmente se firmó el acto notarial y eso tampoco es delito.

 Sea esta la oportunidad para invitar a todas las personas que sabemos de la honestidad del Dr. GAJM a no dejarse influenciar de los comentarios necios y a tener fe en nuestras instituciones porque solo ellas son las encargadas de impartir justicia.

 En mi calidad de apoderado del Dr. GAJM, invito a la opinión pública a creer en la Fiscalía y en los Jueces de la República, pues son solo ellos los llamados a decir lo que sucedió, una vez realicen la investigación de lo sucedido.”

De otra parte, la notaria Primera de Ibagué, Doris Mora Orrego, denunció el presunto hecho de haber sido asaltada en su buena fe, pero abogados especializados en el tema señalan que la Notaria busca encubrir su error al no registrar y numerar la escritura de la referencia, en la misma fecha que la firmó Jaramillo Roncancio, que fue el primero que suscribió el documento. Lo hicieron 62 días después, cuando la suscribió G.A. Jaramillo, y para ese entonces, había fallecido su familiar.

G.A. Jaramillo, no la firmó antes porque en aquella época se desempeñaba como secretario de Salud de Bogotá, y según su abogado, no disponía de tiempo para haberlo hecho antes.  

En conclusión, de ser esta versión cierta, los únicos responsables de esta falla son los funcionarios de la Notaría Primera, por no haber registrado y numerado a tiempo el documento como lo establece la ley, que señala que las escrituras se fechan y numeran cuando las firma el primero de los intervinientes en la negociación.