Las lluvias que cayeron los últimos días en Ibagué hicieron pensar que el fenómeno de El Niño era cuestión del pasado. Sin embargo, el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam) aclaró que las lluvias hacen parte del fenómeno, el cual contempla una mezcla de tiempo seco y precipitaciones. 

“Lo que nos ha dicho el Ideam es que se disminuyen las precipitaciones pero no las quita del todo. En este caso las lluvias refrescan nuestra vegetación y hacen que bajen los incendios forestales, pero mantenemos la alerta naranja”, aseguró Jessica Salcedo, secretaria de Ambiente y Gestión del Riesgo. 

La funcionaria enfatizó que la capital del Tolima sigue en alerta amarilla por disminución en los caudales de las fuentes abastecedoras Combeima y Cay. A su vez, indicó que las lluvias hacen presencia en el casco urbano, por lo que es fundamental limpiar los colectores y canaletas para evitar inundaciones.

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Igualmente, frente a los incendios forestales, la secretaria declaró que se han reducido: “Al cierre del 31 de enero el Cuerpo Oficial de Bomberos atendió 67 emergencias; con el mayor número de casos en la comuna 7 en los barrios: El Salado, Protecho - Salado, Modelia, Santa Ana; en la comuna 9 vía al Aeropuerto, Picaleña; en la comuna 6: La Gaviota, Cañaveral y en la comuna 8 en El Jardín, Tulio Varón y Ciudadela Simón Bolívar”.

Finalmente, Salcedo reiteró que el tiempo seco irá hasta el primer trimestre del año. Entre abril y junio se debería alcanzar la normalidad. 

"Aquí es importante tomar conciencia y no generar estas conflagraciones que afectan el ecosistema, por eso invitamos a no arrojar colillas de cigarrillos, vidrios y elementos que conduzcan a los incendios; de igual manera, hidratarse y usar protector solar", concluyó.