Este domingo la Fiscalía General de la Nación informó sobre la judicialización de Bryan Steven Lozano, el padrastro de Eileen Scarlet Páez, la niña de 2 años que desapareció desde el pasado 5 de abril en zona rural de Roncesvalles, Tolima. 

De acuerdo con la Fiscalía, sus investigadores consiguieron las pruebas suficientes para demostrar las violentas agresiones que el joven de 20 años le infringía a la pequeña Eileen y a la madre de la niña. 

"Los hechos investigados ocurrieron entre el 21 de marzo y el 5 de abril del presente año. Al parecer, mientras la mamá de la menor de edad se ausentaba del lugar de residencia, su pareja golpeaba a la niña. En alguna ocasión la habría atacado con una manguera porque olvidaba ir al baño", reza el comunicado de la Fiscalía.

Según una denuncia interpuesta ante una comisaría de familia, Eileen presentaba contusiones en varias partes del cuerpo y el hombre las justificaba con el supuesto de que su hijastra se había caído.

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La madre de la niña también sería víctima de malos tratos por pretender alejarse de su compañero sentimental. Presuntamente le restringió el contacto con sus familiares y la obligaba a borrar mensajes en el celular que contenían evidencias de los ataques que padecía.

Así las cosas, la Fiscalía le imputó a Lozano el delito de violencia intrafamiliar agravada con enfoque de género, que no aceptó haber cometido. Es decir, la Fiscalía judicializó al joven por los graves actos de maltrato intrafamiliar. Sin embargo, nada tiene que ver su judicialización con la desaparición de la niña. 

Eileen Scarlet completa nueve días desaparecida. Todavía nada se conoce de su paradero. Si bien su padrastro es el principal sospechoso de una posible desaparición forzada, todavía no existen suficientes pruebas para acusarlo directamente. 

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Entretanto, el padrastro permanecerá en una cárcel, pues un juez de la República le impuso medida de aseguramiento en centro penitenciario, mientras avanza la investigación y el proceso judicial.