Las emergencias que provocaron las fuertes lluvias durante la semana anterior, dejaron al descubierto que el sistema de alerta temprana se encuentra fuera de servicio en el Cañón del Combeima.

Cuando los residentes del Cañón trataron de advertir sobre la caída de un puente en el sector de Pico de Oro o sobre una creciente súbita del río Combeima, no pudieron hacerlo por el deficiente estado en el que se encuentra el sistema.

De acuerdo con José Batta, líder social de Villa Restrepo, los equipos como las sirenas y radios de telecomunicaciones, se encuentran fuera de servicio por falta de mantenimiento o de baterías.

"Aquí hay unas alarmas supuestamente de alerta temprana, pero desafortunadamente cuando las necesitamos no funcionaron. También supuestamente tenemos radios en las partes altas, donde empiezan las quebradas y ríos, pero en su gran mayoría no están funcionando", aseguró Batta en diálogo con El Cronista.co.

El líder social afirma que la semana anterior se quedaron totalmente incomunicados, ya que, las lluvias afectaron el fluido eléctrico y la señal de telecomunicaciones. Por tanto, acudieron a los equipos de alerta temprana para advertir a los organismos de socorro sobre la creciente del río Combeima, pero el sistema nunca funcionó.

"El sistema está instalado, lo que pasa es que falló. Las baterías de unas alarmas estaban apagadas y apenas estaban funcionando 13 radios en todo el Cañón del Combeima. Esto no puede pasar, porque el sistema es muy importante para prevenir una tragedia en el Cañón", enfatiza.

Lo que más preocupa a los residentes del Cañón, es que la temporada invernal apenas comienza. De acuerdo con Cortolima, entre junio y julio debería empezar en firme el fenómeno de La Niña, por lo cual será fundamental el sistema de alerta temprana.

El sistema fue instalado desde el año 2018 en la administración de Guillermo Alfonso Jaramillo. Sin embargo, durante los últimos años les faltó mantenimiento a los equipos, que ahora se encuentran deteriorados o fuera de servicio.

En palabras de José Batta, si el sistema estuviera funcionando correctamente, la semana anterior se hubiera podido evitar el colapso de la bocatoma Combeima, que dejó sin agua potable a toda la ciudad durante 24 horas.

"El río Combeima es una mina de oro para las empresas como el IBAL y lo mantienen descuidado. De aquí depende el 80 % del agua para todo Ibagué, ellos son los que más deberían tener alertas tempranas para que la gente esté informando y cierren compuertas, pero no funcionan los equipos", expuso Batta.

Ahora se espera que en los próximos días la Alcaldía de Ibagué y la Gobernación del Tolima cumplan sus promesas de poner en funcionamiento los equipos antes de que empiece el fenómeno de La Niña.