El Hospital Federico Lleras Acosta de Ibagué ha estado sumido en la incertidumbre en los últimos meses, especialmente en lo que respecta a la figura de su gerente, Luis Eduardo González. Sin embargo, una reciente revisión del certificado de antecedentes de la Procuraduría General de la Nación ha arrojado un cambio significativo en su situación. El gerente ya no tiene la inhabilidad que se le registró el 9 de junio de este año, lo que marca un punto de inflexión en su regreso al cargo.

La ausencia de González se prolongó por casi tres meses, inicialmente debido a la inhabilidad para ocupar cargos públicos emitida por la Procuraduría General de la Nación el 9 de junio del presente año. En el mismo certificado se mencionan las etapas de la investigación en su contra, la primera de ellas realizada por la Gerencia Departamental Colegiada del Tolima con una providencia fechada el 3 de noviembre de 2022, la segunda instancia por parte del Contralor Delegado Intersectorial Número 3 con una providencia fechada el 6 de julio de 2023, y finalmente, la reposición emitida por la Gerencia Departamental Colegiada del Tolima el 27 de abril de 2023.

Durante su ausencia, González solicitó, presuntamente, el pago de su período de vacaciones y posteriormente tomó una licencia por motivos de salud, tiempo que utilizó para preparar su defensa. No obstante, el 18 de mayo, González y otras personas relacionados con la adquisición del acelerador lineal se enteraron de las medidas cautelares impuestas por la Contraloría General de la República-Gerencia Tolima en el proceso de responsabilidad fiscal No 463 del 28 de septiembre de 2022 No 2022-41887. 

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Estas medidas se relacionan con el presunto detrimento económico por valor de 4.895.049.240 pesos causado al Hospital Federico Lleras Acosta. Entre las medidas, se incluyó el embargo del salario de González como gerente, un caso que continúa bajo investigación.

González, ahora de vuelta en su rol de gerente, ha expresado su visión para el futuro del hospital. Su objetivo principal es seguir mejorando la atención médica en el departamento y garantizar la estabilidad financiera de la institución. Además, se ha pronunciado sobre la reforma de salud y ha manifestado su respaldo al giro directo de recursos para fortalecer la institución. Ha enfatizado la importancia de obtener los recursos necesarios para respaldar a los empleados y mantener el hospital operando de manera efectiva.

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En cuanto al acelerador lineal, González ha confirmado que se espera su pronta llegada y su operatividad a partir de enero, lo que mejorará significativamente la capacidad de tratamiento del hospital. Ha asegurado que se han tomado medidas para garantizar su calidad y funcionamiento óptimo, lo que representa un paso importante hacia el avance de los servicios médicos que ofrece el hospital a la comunidad.