Con el día del alumbrado o de las velitas se inicia la navidad en el mundo católico. Con este adviento el mundo católico se prepara para el nacimiento de Jesús, así lo dio a conocer el padre Fernando Aguirre, quien dijo que a partir de hoy los creyentes se alistan para celebrar un año más del nacimiento de Jesús y con este su segunda venida.

Cuando se prenden las luces de las velas, de los faroles, de las bombillas, hoy 7 de diciembre, se da inicio a una nueva navidad en Colombia y en el mundo creyente de Jesús, expresó el sacerdote.

En la época de los romanos cuando visitaban ciudades lejanas del imperio, estas se preparaban para el advenimiento, dijo el padre Fernando Aguirre. Litúrgicamente   es una fiesta inmediata a la venida del Salvador.

Recordó que el advenimiento o adviento es preámbulo a la navidad, son tres domingos más el 24 de diciembre. La corona del advenimiento que se coloca en los hogares católicos y en los templos llevan cuatro velas y se prende cada una en las semanas correspondientes, la cual representa la luz del hijo del hombre.

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Esta tradición de la corona de adviento dijo el sacerdote Fernando Aguirre, llegó hace poco a Latinoamérica y es una costumbre anglosajona, de la parte norte del continente europeo la cual se expandió y por todo el mundo y luego llegó a Latinoamerica.

No obstante, esta celebración ha con el correr de los años se ha venido transformando, y hoy es utilizada más como un elemento comercial para motivar el turismo que con fines espirituales y de recogimiento como lo hacían nuestro antepasados. El comercio ha penetrado también, desde hace años, el mundo de la espiritualidad y de la religión.  

El sacerdote recalcó que la celebración conocida como el día de las velitas, no se llama así, sino que es la víspera de la solemnidad de la Inmaculada Concepción de la virgen María y es cuando la iglesia en el año de 1.854 celebra el momento en que fue concebida sin pecado original. 

En esa oportunidad el papa de la época y el clero en Roma, salieron a las calles con antorchas desde la noche del siete de diciembre hasta el 8 a celebrarlo y es así que los católicos se sienten representados y por eso colocan en sus casas las velas que es un homenaje a la madre de Dios que lo dio a nosotros para que se convirtiera en luz de nuestra salvación y del mundo, expresó el sacerdote Fernando Aguirre.

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Y anotó que el alumbrado que se evidencia en las calles, las casas, significan que cristo es la luz del mundo. El sacerdote invitó a los creyentes a izar la bandera de la virgen al mismo tiempo recordó que en esta fiesta se ora el magníficat que es cuando la virgen quedó en estado de concepción.
Al iniciarse una nueva navidad el padre Fernando Aguirre dijo que debe ser espiritual, lastimosamente algunos la han convertido en pagana por que se dedican a ingerir licor y a  comer de manera desmesurada.

Es curioso que en el siglo IV los cristianos tomaron las fiestas que eran paganas y las convirtieron en suyas, mientras ahora se vea lo contrario, por eso debemos prepararnos espiritualmente, porque ahora la navidad se ha convertido en natilla, buñuelo, tamales y licor.

Esta época hay que vivirla en paz, en reconciliación con nuestras familias y amigos, expresó el párroco de la iglesia de San Bonifacio, Fernando Aguirre.