El 27 de enero de este naciente 2024, en una de las tantas regiones olvidadas por el conflicto, la violencia, el abandono e incluso por el posacuerdo, como lo es el municipio de Dolores, ubicado al suroriente del Tolima, se celebró el primer ‘Festival Altamizal Memoria’.

En el corazón de este poblado vía Alpujarra, en la cordillera suroriental, aún se conserva con identidad el recuerdo de la antigua Radio Altamizal, emisora que desde la década de 1970 comenzó a trasmitir a través de las ondas hertzianas y con ello inició un medio de comunicación que se convirtió en el principal vínculo de Dolores con el departamento, el país y el mundo.

En este festival de memoria confluyeron importantes iniciativas de paz como la de la Red de Vigías del Bosque Galilea y el Movimiento de Víctimas de Crímenes de Estado MOVICE Capítulo Tolima, quienes compartieron una exposición fotográfica junto con los archivos de imágenes de la antigua Radio Altamizal.

Asimismo, la gastronomía y el emprendimiento ocuparon un lugar privilegiado en medio del festival con los bizcochos de Vianey Bastidas; los ‘chuchos’ (bebida alcohólica artesanal de la región) de Daniel Berdugo; Aperitivos Artesanales Eduar’s de Bermejo; Café Galilea ‘Sabor de Vida y Paz'; los colectivos juveniles de turismo comunitario con lo mejor de su gastronomía; recuperación de semillas con ‘Los Hijos de Altamizal’. Esta tarea fue posible, en gran parte, gracias al apoyo de ANCESTRO, Casa Andina Gastrobar, entre otros amigos y amigas del Festival Altamizal Memoria en su primera edición.

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Fotografías: Leidy A. Villamor- Red de Vigías del Bosque Galilea

Como se convocó a una ‘minga’, varios de los pobladores y visitantes contribuyeron con aportes en dinero, en especie o con su propio trabajo con el fin de realizar este festival autogestionado, sin ánimo de lucro y con fines pedagógicos y de memoria.

Cada una de las iniciativas tuvo micrófono abierto y su espacio para enseñar sus productos y procesos sociales, intercambiar experiencias con el Alcalde de Dolores Tolima, Jhon Vergel, y la gestora social Nohelia Castro, quienes facilitaron materiales, sonido y fueron colaboradores para la realización del evento.

Por otro lado, los asistentes y participantes pudieron compartir con el Director Territorial de la Unidad para las Víctimas zona Centro, Dr. Guido Bonilla, también convocado por Altamizal Memoria con el fin de crear puentes entre la institucionalidad local, nacional y las iniciativas de base.

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Al cierre de este primer Festival Memoria Altimazal, el alcalde Vergel manifestó de manera reiterada su interés por esta iniciativa, su aprecio por el proceso radial y sus fundadores Rosana Duarte y Héctor Hernández Navarro. Este festival tiene la intención de realizarse una vez al año, con el fin de reactivar y/o difundir procesos de memoria, capacitar en áreas necesarias a las distintas iniciativas aliadas a Altamizal Memoria, reflexionar sobre las políticas, funciones y perspectivas de la memoria histórica regional.

Los organizadores del festival afirmaron que con la realización de este evento “se rompe el silencio en una zona donde poco se ha enraizado la cultura de la memoria histórica ampliamente participativa, mucho menos los procesos de esclarecimiento de la verdad, justicia restaurativa ni transicional, en una subregión relegada de gran parte de las políticas públicas de víctimas, programas de desarrollo con enfoque territorial, informes de memoria, entre distintas formas de protección jurídica para grupos olvidados, apartados y estigmatizados por décadas”.