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El empresario tolimense capturado por presuntos nexos con paras y el Clan del Golfo

El empresario tolimense capturado por presuntos nexos con paras y el Clan del Golfo

Tomada de internet. El empresario Jorge Oswaldo Castaño Galindo.

Jorge Oswaldo Castaño Galindo es el nombre del empresario tolimense que cayó junto a dos exoficiales de la Policía Nacional, por presuntos nexos con grupos paramilitares y narcotraficantes.

En un comunicado a la opinión pública, la Fiscalía General de la Nación informó que Castaño Galindo, junto a los dos reservistas, fueron capturados por prestar sus empresas de seguridad privada para carnetizar a cabecillas e integrantes de estos grupos criminales. Así, les ayudaban a portar armas de fuego con salvoconductos y evadir los controles de las autoridades, según la Fiscalía.

El empresario Castaño Galindo resultó ser el representante legal y gerente de la compañía Sara Ltda, con una sede en el centro de Ibagué, la cual también ha sido contratista del Estado en los últimos años.

De acuerdo con el informe de la Fiscalía, Castaño Galindo colaboró con grupos criminales como las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), las Autodefensas Campesinas del Magdalena Medio y una estructura armada del ‘Clan del Golfo’.

En concreto, el informe indica que “la empresa de Castaño Galindo, al parecer, suministró armas de fuego a Jhon Fredy Gallo Bedoya, alias Pájaro, exintegrante de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) en el Magdalena Medio, también judicializado por la fuga del fallecido alias ‘Matamba’”.

A su vez, el empresario tolimense es señalado de suministrar armas a “Oliverio Isaza Ramírez, alias Terror, exjefe de las extintas Autodefensas Campesinas del Magdalena

Medio y de una estructura armada del ‘Clan del Golfo’, quien fue abatido por la Policía el pasado 22 de febrero en Puerto Triunfo, Antioquia”.

Ahora, debido a la investigación de la Fiscalía, el dueño de Sara Ltda. deberá responder por los delitos de concierto para delinquir agravado con fines de lavado y

enriquecimiento ilícito, los cuales no aceptó.

Asimismo, la Fiscalía aplicó extinción de dominio a los bienes de la empresa Sara en Ibagué, donde hallaron armas de bajo y alto calibre, además de dinero en efectivo.

¿Quién es el empresario?

El nombre de Jorge Oswaldo Castaño Galindo surgió a la palestra pública en octubre de 2023, cuando se conoció que su esposa es la investigadora del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía, Omaira Méndez Lozada. A su vez, trascendió que Sara fue una empresa ampliamente beneficiada con contratos publicos durante la administración del exalcalde de Ibagué, Andrés Fabián Hurtado.

Las denuncias las hizo públicas el entonces candidato a la Alcaldía de Ibagué, Marco Emilio Hincapié, a quien le llamó la atención la contratación de Sara con la Unidad de Salud de Ibagué (USI), la cual ascendió a los $1.600 millones entre los años 2021 y 2023.

Para Hincapié, resultaba cuanto menos sospechoso que el esposo de una investigadora del CTI que podría participar en procesos judiciales contra el alcalde, se viera beneficiado con contratos en la administración municipal que dirigía el mismo Hurtado.

"Hemos visto cómo le precluyen el proceso al alcalde, desaparecen las pruebas, el primo de su esposa fue condenado y después absuelto. Son muchas las dudas que generan estos contratos. Ahora la Fiscalía debe entregarle respuestas a la ciudadanía. ¿Por qué la funcionaria siguió vinculada en estos casos contra el alcalde Andrés Hurtado, cuando su esposo y su hijo se ganaban contratos con la USI?”, cuestionó en su momento Hincapié, pero las respuestas hasta ahora no se conocen.

Sin embargo, tampoco se estableció si la investigadora Méndez Lozada participó directamente en alguna investigación contra Hurtado, como la de los piques ilegales en el Aeropuerto Perales o el uso indebido del estadio Manuel Murillo Toro.

En los procesos contractuales, Sara ganaba las licitaciones como único oferente, por lo que el excandidato planteó un posible direccionamiento a su favor. Más de un año después de estas denuncias, se conocieron los presuntos vínculos de Castaño Galindo con paramilitares y el Clan del Golfo, la banda criminal más grande del país.

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