Desde el año 2003 se celebra anualmente y en todo el planeta el Día Mundial de la Prevención del Suicidio, impulsado por la Organización Mundial de la Salud y que se fijó para el 10 de septiembre. Actualmente, para el periodo 2024-2026 la jornada se enmarca en el lema “Cambiar la narrativa” frente al suicidio y su objetivo es romper todo tipo de barreras y estigmas frente al tema, así como también, crear conciencia y una cultura de prevención ante este tipo de muerte. Esta conmemoración está dirigida a individuos, comunidades, organizaciones de salud y los gobiernos, cuyo rol frente al suicidio es muy importante. 

En cuanto a la celebración de este día en el Tolima, la Secretaría de Salud departamental creó el programa “Amor por la vida, con la mente y el corazón en el territorio” y adelanta acciones junto con entidades públicas y privadas para llevar a las regiones del departamento iniciativas que generen impacto en las comunidades ante la prevención del suicidio que están enlazadas también con la Política de Salud Mental de la Nación.

La situación actual en el Tolima frente al suicidio es preocupante, según la secretaria de Salud, Katherine Rengifo, quien expresó que: “queremos expresar nuestra preocupación por el incremento progresivo de las tasas de suicidio y de intento de suicidio en el país y en el departamento”.
Por su parte, Sandra Bedoya, coordinadora del programa impulsado por el Gobierno departamental, menciona que hay distintos factores que influyen en la decisión de una persona de quitarse la vida como lo son: el estado de salud de la persona, factores sociales como situaciones de estrés, desempleo o pobreza, consumo de alcohol y sustancias psicoactivas, las relaciones interpersonales y familiares, padecimiento de enfermedades crónicas, entre otras y expresa que:  “invitamos a los padres de familia y/o cuidadores, a las instituciones educativas, sector empresarial, entidades públicas, privadas y a la  comunidad en general a trabajar de la mano tejiendo una gran red, que permita disminuir el estigma en salud mental y fortalecer factores protectores entorno al cuidado y la gestión de la salud mental”.

Ante esto, es fundamental que se den procesos de educación para las comunidades que permitan identificar y caracterizar los riesgos en salud mental que pueda tener una persona de manera temprana y así pueden intervenir las instituciones de salud de forma efectiva ante casos de intentos de suicidio. 

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Cifras que preocupan:

El contexto actual del suicidio en Colombia arroja cifras preocupantes, porque las tasas de este han venido aumentando progresivamente en las últimas dos décadas. Por ejemplo, a lo largo del año 2012 se presentaron 1.901 suicidios, mientras que en el 2021 la cifra aumentó a 2.350 casos en todo el país. Las cifras más próximas al 2024 datan que en el 2023 se registraron 3.145 suicidios, ya que la pandemia del COVID-19 impactó la salud mental en materia de pensamientos e intentos de suicidio en los colombianos. 

Cifras de suicidio en la región:

Si se ahonda en la situación del suicidio en el Tolima, las cifras demuestran que para el 2023 la tasa fue de 65,8 casos por cada 100.000 habitantes, según reportes del Sistema de Vigilancia Epidemiológica del departamento. Por fortuna, el panorama en lo que va del 2024 muestra un total de 741 casos reportados en la semana 32, pero se observa una disminución de 10.4% que se traduce en 83 casos menos frente a la misma semana del 2023 que fue de 797. 

Hay factores comunes en los casos de suicido que se reportan en el departamento como lo son: problemas familiares, conflictos de pareja y el padecimiento de enfermedades crónicas en las personas y se registra que los métodos más utilizados para ponerle fin a la vida son las intoxicaciones por sustancias o medicamentos, el uso de armas cortopunzantes y lanzamientos al vacío. Dentro de los factores de riesgo que influyen en el suicidio se encuentran el miedo al rechazo, la soledad, pertenecer a una familia disfuncional, haber sido víctima de violencia, padecimiento de patologías crónicas y mentales, el abuso de alcohol y el consumo de sustancias psicoactivas.   

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También hay factores demográficos en cuanto a los casos registrados, pues las mujeres se suicidan y tienen más intentos que los hombres. Las zonas urbanas tienen cifras mucho más altas que las zonas rurales y la población más impactada son los adolescentes, adultos jóvenes y adultos mayores. 

Desde la administración departamental se reitera la importancia de identificar a tiempo los rasgos de una conducta suicida para actuar oportunamente. Se recuerda también que el suicidio no discrimina las condiciones socioeconómicas o las edades y el énfasis de la prevención del suicidio en el Tolima se dan en niños, adolescentes y adultos mayores. Una intervención temprana puede salvar una vida y el suicidio se puede prevenir.

¡La salud mental en el Tolima es asunto de todos!