El presidente ejecutivo de la Cámara de Comercio de Ibagué, Carlos Hernando Enciso, advirtió sobre los impactos negativos que podría traer para el departamento del Tolima la Ley de Financiamiento o reforma tributaria que radicó el gobierno del presidente Gustavo Petro en el Congreso de la República, la cual busca recaudar $26,2 billones.

"Reconocemos la importancia de fortalecer las finanzas públicas, pero advertimos que la estructura del proyecto puede generar impactos negativos en la inversión, el consumo y la competitividad empresarial, especialmente en departamentos como el Tolima", dijo Enciso.

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Entre las principales preocupaciones de la CCI contempladas en el texto preliminar de la reforma figuran modificaciones significativas como:

• Un aumento de la tarifa de renta corporativa del 35 % al 38 % para grandes contribuyentes.
•  La eliminación de exenciones y descuentos sectoriales, particularmente en agroindustria, economía naranja y turismo.
•  Un incremento gradual en el impuesto al carbono y a los combustibles fósiles.
• Nuevos gravámenes sobre dividendos distribuidos por personas jurídicas.
• Ajustes al IVA que podrían afectar bienes de la canasta ampliada y servicios digitales.

"En términos generales, estos cambios encarecerían la operación de las empresas y reducirían sus márgenes de reinversión. De acuerdo con análisis recientes, un alza de tres puntos en la renta corporativa restaría hasta 0,5 % al crecimiento económico nacional proyectado para 2026 y comprometería la creación de cerca de 80.000 empleos formales", aseveró Enciso.

Para el Tolima, la situación es particularmente sensible, según el director del ente cameral. La economía del departamento, con un Producto Interno Bruto (PIB) cercano a 37 billones de pesos en 2024, depende en un 23 % del agro, en un 20 % del comercio y transporte, y en un 9 % de la industria manufacturera.

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"Sectores como el café, los frutos secos y la agroindustria en general podrían ver reducidos los beneficios que hasta ahora estimulaban la modernización y la formalización. El comercio minorista y mayorista enfrentaría menor consumo debido a la presión sobre los hogares, mientras que la construcción y la industria tendrían incrementos de costos asociados a los tributos ambientales y energéticos", arguyó Enciso.

En consecuencia, la Cámara de Comercio le pidió al Gobierno nacional y al Congreso que protejan a las micro, pequeñas y medianas empresas, que representan más del 98 % del tejido empresarial en su jurisdicción y que difícilmente soportarían nuevas cargas tributarias sin poner en riesgo su permanencia en la formalidad.

"Asimismo, solicitamos que se contemplen mecanismos de transición y compensación para sectores estratégicos, y que se fortalezca de manera decidida la lucha contra la evasión, en lugar de seguir aumentando las tarifas a quienes ya cumplen con sus obligaciones", remarcó Enciso.

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Por su parte, los Gremios Económicos del Tolima sostienen que la reforma tributaria busca aumentar el gasto en burocracia en lugar de promover la inversión o el crecimiento económico en el país.

"Preocupa que la destinación de estos recursos no sea en inversión estatal en infraestructura, innovación, turismo, agroindustria y comercio, que son los pilares para el desarrollo y la formalización laboral", reza el comunicado emitido por los gremios.

Por último, los Gremios condicionaron a los parlamentarios del Tolima a votar en contra de la reforma tributaria, y pidieron a los ciudadanos "analizar con rigor el actuar de los congresistas tolimenses" para que no respalden "propuestas que incrementan el gasto estatal sin generar bienestar ni oportunidades".