En medio de una Liga marcada por la agresividad en el campo y las constantes expulsiones, el Deportes Tolima destaca por su juego limpio y control emocional. Hasta antes de disputarse la última fecha, el campeonato ya contabilizaba 102 tarjetas rojas, la cifra más alta desde 2011, con un promedio de 0,60 expulsiones por partido.

El equipo vinotinto y oro solo registra dos expulsados, ubicándose entre los clubes con menos sanciones disciplinarias del torneo. Un logro que refleja no solo la solidez táctica del conjunto vinotinto y oro, sino también el trabajo en la gestión emocional de sus jugadores.
En contraste, La Equidad encabeza la tabla de los más sancionados con 12 expulsiones, seguida de Deportivo Pereira (8), Atlético Bucaramanga (7), Envigado (7) y Unión Magdalena (7). Todos estos equipos han enfrentado problemas de continuidad y rendimiento por las constantes ausencias derivadas de las tarjetas rojas.

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Árbitros con más expulsiones

El análisis también destaca a los jueces más rigurosos del semestre. Wílmar Roldán y Alexander Ortiz, ambos árbitros internacionales, son los que más tarjetas rojas han mostrado, con 14 cada uno. En el tercer lugar se ubica Carlos Ortega, con 12 expulsiones, seguido por Luis Matorel y Steven Camargo con 6, y Jairo Moyorga y Alexander Ospina con 5.
Estos nombres se repiten en partidos con alta carga emocional y disputas intensas, donde las decisiones arbitrales han sido determinantes.

Causas del aumento de expulsiones

El comportamiento disciplinario en la Liga BetPlay 2025 refleja una tendencia preocupante. Según el análisis de Fedefútbol y el Observatorio CIES, la liga colombiana es una de las que más expulsiones registra en el mundo, con un promedio de 0,40 tarjetas rojas por partido.
Las principales causas de las expulsiones en Colombia son el juego brusco grave (42 casos), la conducta violenta (28) y la doble amonestación (17). Para el analista y exárbitro José Borda, esto obedece a que “la Liga se ha vuelto más competitiva y los jugadores emplean más fuerza en la disputa del balón, muchas veces sin medir las consecuencias”.
Por su parte, el exárbitro internacional Wílmer Barahona considera que la tecnología también ha influido: “Con el VAR, los árbitros pueden revisar en cámara lenta el punto de contacto. Antes, esas jugadas pasaban inadvertidas; ahora todo se ve y se sanciona”.

Tolima, disciplina y regularidad

Mientras varios equipos luchan por controlar su temperamento, el Deportes Tolima ha sabido mantener la compostura dentro del campo. Su bajo número de expulsiones refleja una cultura de disciplina táctica y de respeto por el reglamento que, además, se ha traducido en resultados deportivos positivos.
En un campeonato donde los excesos y las sanciones marcan la diferencia, el conjunto tolimense demuestra que el orden, la cabeza fría y la estrategia limpia también son claves para mantenerse en la parte alta de la tabla.